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El lucrativo negocio del aborto: Experta revela el dolor detrás de las ganancias

La vida del no nacido se convierte en estos casos una mercancía, dejando de lado el valor inherente de su humanidad.

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Foto: Julio Hortiales.

Ciudad de México.- El debate sobre el aborto tardío no solo gira en torno a la defensa del derecho a la vida del no nacido, sino que también revela profundos intereses económicos y comerciales. Estas dinámicas han generado repercusiones que trascienden el ámbito de los derechos reproductivos, afectando diversas esferas de la sociedad.

La reciente entrevista realizada por Siete 24 Noticias a la Dra. Rosario Laris Echeverría, experta en Bioética, Salud Pública y fundadora y directora de la Fundación Sexo Seguro A.C., pone en la mesa una reflexión profunda sobre el debate del aborto.

Foto: Julio Hortiales.

Laris no solo expone la defensa de la vida del no nacido, sino que también destaca los intereses económicos y comerciales que están entrelazados con esta práctica, generando consecuencias que van más allá del ámbito de los derechos reproductivos.

La discusión en torno al aborto ha sido tradicionalmente dominada por la defensa del derecho a elegir de las mujeres.

Sin embargo, como advierte Laris, la despenalización del aborto no solo ha facilitado el acceso a este procedimiento, sino que ha impulsado un crecimiento exponencial en el número de abortos realizados.

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 Esta problemática no es exclusiva de México.

Larís Echeverría expuso que casos como el de España y el Reino Unido muestran un aumento alarmante en el número de abortos desde su legalización.

“En España, tras la despenalización en 1985, el número de abortos ha crecido de 16 mil al año a más de 2.4 millones. De manera similar, en el Reino Unido se ha pasado de 23 mil a 194 mil abortos anuales desde 1968”, externó.

Este incremento dijo revela que detrás de la legalización se esconde una industria comercial que se beneficia económicamente del aborto.

El comercio con la vida y restos del no nacido.

Clínicas, laboratorios y grupos médicos forman parte de esta maquinaria, lo que, según Laris, transforma el aborto en un “derecho” promovido por intereses comerciales, más que como una opción excepcional para las mujeres.

Uno de los aspectos más preocupantes señalados por la doctora es el tráfico de órganos de bebés abortados.

Denunció que organizaciones como Planned Parenthood, la mayor red de clínicas abortistas en el mundo, han sido acusadas de vender los órganos de fetos abortados.

Foto: Norma Pérez

Este comercio oscuro, en el que los órganos de fetos en desarrollo son valorados para investigaciones médicas, plantea una grave preocupación bioética.

La vida del no nacido se convierte en una mercancía, dejando de lado el valor inherente de su humanidad.

Los riesgos éticos.

Rosario Laris también resaltó los peligros que el aborto puede implicar para la salud física y mental de las mujeres.

Los procedimientos quirúrgicos, así como las consecuencias psicológicas post-aborto, son factores que muchas veces no reciben la atención necesaria en el debate.

Aumentan hospitalizaciones de mujeres por abortos caseros en Inglaterra y Gales

Según la doctora, muchas mujeres que han abortado enfrentan complicaciones de salud y estrés postraumático, lo que resalta la necesidad de un análisis más profundo sobre el impacto del aborto en la salud femenina.

La objeción de conciencia en los médicos.

Finalmente, la especialista aboga por la objeción de conciencia como un derecho fundamental para los médicos.

La actual presión por parte de las autoridades hacia los profesionales de la salud para realizar abortos, a menudo en contra de sus principios éticos, plantea un reto para quienes juraron proteger la vida.

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La objeción de conciencia no debería ser vulnerada, ya que se trata de un principio ético que protege tanto a los médicos como a las mujeres, evitando que el aborto sea visto como un simple trámite sin repercusiones”. concluyó.

ARH

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