“Prohibidos proselitismo político e inducción al voto en templos”: Arquidiócesis de México

A través de una circular dirigida a los responsables de los territorios pastorales de la Arquidiócesis de México, el obispo vicario general del arzobispado, Salvador González Morales, instruyó a sacerdotes y agentes pastorales capitalinos a colocar un aviso en todos los templos con el que se recuerda la prohibición legal expresa de los centros de culto a realizar cualquier acto de proselitismo o campaña política así como la prohibición de que los ministros de culto realicen “cualquier acto tendente a presionar o inducir a cualquier persona para realizar el voto en algún sentido”.

González Morales, primero entre los colaboradores de mayor jerarquía del cardenal arzobispo Carlos Aguiar Retes, asegura que el documento en cuestión fue preparado por la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) con el objetivo de “recordar a los fieles católicos su derecho y obligación de participar en las elecciones de manera libre, consciente y responsable” al mismo tiempo de “subrayar la prohibición que tienen las asociaciones religiosas de realizar cualquier tipo de proselitismo político o partidista en el contexto de las celebraciones litúrgicas y otras actividades pastorales”.

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La circular también sugiere que la prohibición no se limita a los ministros de culto registrados ante la Secretaría de Gobernación sino también a los fieles laicos que participan de los servicios y estructuras de acción pastoral de sus parroquias: “A los agentes de pastoral han de exhortarles a abstenerse de cualquier acto que pueda interpretarse como una inducción o coacción del voto de los fieles”.

El obispo también recomienda a los ministros de culto a que en los templos se realicen jornadas de oración por la paz, la reconciliación y la unidad de todos los mexicanos; hace preces por que “estas elecciones sean una oportunidad para fortalecer la democracia, promover la justicia social y construir una sociedad más fraterna, donde se respete la dignidad de cada persona y se promueva el desarrollo integral de todos, especialmente de los más pobres y vulnerables”.

El documento en cuestión se titula “La Iglesia católica y el voto: Participación cívica y respeto a la ley”. En primer lugar invita a la feligresía a ejercer su derecho al voto el 2 de junio; destaca los valores del voto universal, libre, secreto y directo; y recuerda que ningún elector debe ser coaccionado o influenciado para votar en sentido contrario a sus propias convicciones e ideologías políticas.

Por ello, el documento obliga a cada recinto religioso a declarar formalmente que “en este templo católico… queda estrictamente prohibido utilizar las reuniones de culto o evangelización para realizar cualquier acto de proselitismo o campaña política”.

La Iglesia también se compromete a que todos los ministros de culto “se abstengan de realizar cualquier acto tendente a presionar o inducir a cualquier persona para realizar el voto en algún sentido”.

Al mismo tiempo, sanciona el que especialmente a los candidatos y partidos políticos (pero también a simpatizantes no afiliados a las plataformas partidistas) realicen “cualquier tipo de promoción o publicidad -verbal, gráfica, escrita o de cualquier otra forma- en favor de candidato, partido o coalición política” tanto al interior de los recintos religiosos como en sus muros, fachadas o bardas limítrofes.

Esto último en consonancia con la denuncia pública presentada por el arzobispo de Monterrey y presidente de la CEM, Rogelio Cabrera López, respecto al uso ilícito de los muros de los templos y parroquias para las campañas de publicidad de partidos y candidatos políticos.

Información original de Felipe Monroy en VCNoticias