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Día Mundial de la Embarazada: Urgen a seguir normas para proteger salud de la madre y el recién nacido

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Ciudad de México.— Rosa Amarilis Zárate Grajales, directora de la Facultad de Enfermería y Obstetricia (FENO) de la UNAM, dijo que en los últimos años, se ha logrado un avance significativo en la atención prenatal en México, ya que cada vez más mujeres acuden a las instituciones hospitalarias durante la segunda mitad del embarazo, es decir, después de la semana 20 de gestación.

Dijo que este hito es crucial, ya que en este periodo es posible identificar y tratar a tiempo alteraciones como hipertensión, diabetes gestacional, amenaza de parto pretérmino, prematurez y asfixia perinatal, entre otras complicaciones.

Zárate Grajales, destacó la importancia de esta tendencia, no obstante, recordó que la Norma Oficial Mexicana NOM-007-SSA2-2016 establece que la vigilancia del embarazo debe iniciarse entre las semanas seis y ocho de gestación.

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“Es fundamental comenzar la atención desde el primer trimestre para implementar acciones preventivas que minimicen riesgos y desviaciones”, explicó.

En el marco del Día Mundial de la Obstetricia y la Embarazada, que se celebra el 31 de agosto, Zárate Grajales subrayó la relevancia de adherirse a los lineamientos de la mencionada norma, especialmente en el puerperio inmediato.

Esta etapa, enfatizó, requiere de una vigilancia estrecha para evitar complicaciones graves como la hemorragia posparto, sepsis puerperal y depresión posparto, que pueden afectar tanto a la madre como al recién nacido.

La directora de la FENO también resaltó que el sistema de salud en México promueve la atención obstétrica de bajo riesgo a cargo de enfermeras obstétricas y perinatales. Estas profesionales están capacitadas para identificar y valorar riesgos, así como para atender el embarazo, parto, puerperio y al recién nacido en entornos humanizados.

“Buscamos que el parto se lleve a cabo con poca o nula medicación, evitando la cesárea a menos que sea estrictamente necesaria, sin episiotomía y con un corte tardío del cordón umbilical”, detalló.

En entrevista, Zárate Grajales enfatizó que las enfermeras obstétricas juegan un papel clave en la promoción del parto humanizado.

Este modelo de atención, explicó, permite que el parto de bajo riesgo se realice en un entorno habilitante, donde la mujer puede adoptar la posición que desee, decidir sobre la administración de medicamentos y estar acompañada por un familiar o persona de confianza durante todo el proceso.

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ebv

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