México
“La libertad religiosa no se circunscribe al culto”, aclaran Obispos de México a ministros de la SCJN
Ciudad de México.— La Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) pidió a los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) reconocer la licitud del carácter religioso en expresiones culturales, mismos que se manifiestan en tradiciones, expresiones artísticas y populares.
A través de un comunicado, los obispos de México se refirieron a los tres amparos que resolverá esta semana la Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación sobre la colocación de nacimientos en espacios públicos en el Sureste Mexicano.
Ante ello, pidieron que los casos deben resolverse de acuerdo a una visión moderna e incluyente y no a una ideología de un Estado laicista que impida el derecho humano a la libertad religiosa.
“Los obispos señalaron que tanto la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos como los Tratados Internacionales firmados por México establecen el derecho humano a la libertad religiosa”, explican en el comunicado.
LEE Pobladores de Chocholá piden a ministros que no les arrebaten costumbres y tradiciones
Llamaron a los Ministros de la Suprema Corte de Justicia a velar por la libertad religiosa, por el Estado Laico, así como por la pluralidad y la libertad de opciones fundamentales, prevista en toda democracia moderna.
Explicaron que todo Estado laico moderno debe garantizar el ejercicio de tener o no, creencias religiosas, y ejercerlas plenamente tanto de manera individual como colectiva, mientras no se afecte el orden público ni se atente contra la dignidad de ninguna persona.
En ese sentido, señalaron que la libertad religiosa no se circunscribe al culto, sino que va mucho más allá de él, abrazando: la libertad de pensamiento, de conciencia, de expresión plasmándose en manifestaciones artísticas y de educación, en tradiciones populares, entre muchas otras. Lo anterior, ha sido reconocido en la Constitución Política y en los Tratados Internacionales de los cuales México es parte.
“En términos sociológicos, se reconoce que toda cultura está marcada por su lenguaje, sus costumbres y tradiciones, y por supuesto, sus creencias religiosas. El ser humano se va cultivando (por ello el término cultura), se va desarrollando no en abstracto, sino según un conjunto de opciones fundamentales: el valor de la vida, la familia, la humildad, el servicio, la fraternidad, el cuidado, la belleza, entre otros”.
Los prelados explicaron que los Estados democráticos modernos se configuran al servicio de cada persona humana, de cada comunidad, promoviendo el ejercicio pleno de sus libertades y no restringiéndolo, como lo hacen los Estados autoritarios. Por ello, desde hace algunos años, distintos gobernantes, intelectuales y el mismo Papa Francisco, han señalado la importancia de entender el Estado Laico, de manera abierta y colaborativa, que promueve el ejercicio de los derechos humanos y configura un tipo de desarrollo humano, integral, solidario y sustentable, sin negar cualquier posibilidad de expresión social y comunitaria de las creencias religiosas.
Finalmente, puntualizaron que México ha optado en su historia y devenir, por ser una República Democrática Moderna, en la que se haga valer y se respeten plenamente los derechos humanos; en la que se reconozca que es el Estado Mexicano el que está al servicio de cada ciudadano, promoviendo sus libertades y la justicia social, en la pluralidad y el respeto de todas las expresiones culturales.
ebv