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PGR investigará explosión en Episcopado

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Ciudad de México.— La Procuraduría General de Justicia capitalina informa que peritos de la Institución determinaron que los daños que sufrieron las instalaciones de la sede de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) fueron causados por la explosión de un artefacto de fabricación casera construido con un extintor, pólvora, cinta adhesiva y una mecha.

Derivado de lo anterior y por tratarse de un inmueble administrado por una asociación religiosa, la carpeta de investigación se enviará a la Procuraduría General de la República para que continúe con la investigación.

El secretario general del CEM Alfonso Miranda Guardiola aseguró que la detonación de un artefacto explosivo en las instalaciones de la Secretaría General del Episcopado Mexicano, la madrugada de este martes, no impedirá que la Iglesia Católica persevere en su compromiso para trabajar por la paz en el país.

El obispo Miranda relató que alrededor de la 01:50 de la mañana del martes en la puerta principal de la Conferencia el Episcopado Mexicano, explotó un artefacto que no afectó a ninguna persona, mientras que a doce horas del incidente agentes periciales levantaron la información de la explosión.

Aunque no había nadie en la recepción ni en las oficinas del edificio, en el inmueble ubicado en las inmediaciones de la Basílica de Guadalupe, habitan el obispo Miranda junto a dos sacerdotes y el personal auxiliar que trabaja en los despachos de la instancia eclesial. La detonación los despertó en la madrugada y, tras ponerse en resguardo, dieron informe a las autoridades.

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Al respecto, la Secretaría de Gobernación condenó los hechos ocurridos en las instalaciones de la Conferencia del Episcopado Mexicano y que ocasionaron solo daños materiales y reiteró su solidaridad y apoyo a las autoridades eclesiásticas para coadyuvar en las investigaciones para esclarecer los hechos y, en su caso, capturar a los responsables.

Según los registros obtenidos de las cámaras de seguridad, Miranda Guardiola relató que, durante la madrugada un hombre en solitario caminó por la avenida Prolongación Misterios hasta llegar al acceso principal de la sede de la CEM; frente a la puerta depositó una bolsa, encendió un cigarrillo con el que dio ignición al artefacto y se alejó caminando antes de que los explosivos detonaran. Al momento no habían identificado al perpetrador ni si guarda alguna relación con algún grupo delictivo.

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Tras verificar la explosión, el personal en el edificio transmitió de inmediato los hechos al presidente del Episcopado Mexicano, el cardenal arzobispo de Guadalajara, Francisco Robles Ortega; al Nuncio apostólico en México, Franco Coppola; y al tesorero general de la CEM, el obispo Ramón Castro. Después dieron comunicación a las autoridades civiles –locales y federales, toda vez que la CEM es una Asociación Religiosa regulada por la Secretaría de Gobernación- las cuales comenzaron los peritajes pertinentes.

A decir del obispo Miranda no se tiene registro de atentados semejantes en la historia de la Conferencia del Episcopado Mexicano; pero en los últimos meses, las agresiones a ministros de culto se han multiplicado exponencialmente.

Durante el sexenio de Enrique Peña Nieto, se han registrado 18 asesinatos de ministros y varios actos violentos contra sacerdotes y templos. Uno de los más recientes fue el atentado contra la vida del sacerdote Miguel Machorro, mientras éste celebraba en la Catedral de México.

Las autoridades eclesiales no descartan en aumentar la seguridad al interior y exterior de las instalaciones toda vez que el lugar laboran, además de los ministros, una treintena de mujeres y hombres.

ebv

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