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¿Está nervioso por el probable resultado de este martes 8 de noviembre?
¿Está nervioso por el probable resultado de este martes 8 de noviembre? ¿En serio?
De entrada, debo decirle que esta histeria anti-Trump, me tiene hasta la coronilla; sedicentes analistas no se cansan de pintar escenarios apocalípticos los cuales, de ganar Trump afirman sin el menor recato, todas las desgracias caerían de un golpe, sobre México y los mexicanos.
¿En verdad esos supuestos conocedores del sistema político de Estados Unidos, creen esas exageraciones?
Le pediría un favor; si esos especialistas piensan que sus presagios son el resultado de un análisis objetivo de la situación en aquel país, no los contradiga; deles por su lado, y siga su camino. Veamos ahora la realidad.
El sistema político estadunidense, es uno donde, los pesos y contrapesos entre los poderes, son algo real, y muy efectivos. Allá, el Poder Ejecutivo no puede hacer lo que le dé su gana, tiene dos contrapesos poderosos y libérrimos: El Congreso con sus dos Cámaras, y la Corte Suprema.
Este equilibrio funciona, y funciona bien; en consecuencia, de querer Trump o la Sra. Clinton tomar ésta o aquella medida que impacte la legislación vigente, particularmente los acuerdos comerciales los cuales, al igual que en México, forman parte del andamiaje jurídico, debe contar con la anuencia del Congreso y, en el caso de los Tratados, del Senado.
Luego entonces, por más intenciones y deseos de cualquiera de aquéllos por cancelar NAFTA o tomar decisiones que, como dije, afectaren leyes vigentes o requirieren recursos para concretar dichos deseos o intenciones, otra vez, deberá contar con la autorización del Congreso, y con los recursos presupuestales para tal fin.
¿De dónde sacan entonces, que tanto una como el otro son omnipotentes para hacer lo que les dé su gana con respecto a México?
De la misma manera, ¿de cuándo acá, México es el país y el tema más importante y prioridad número uno para el gobierno de Estados Unidos?
¿No es hora ya, de dejar atrás esa errónea y perversa visión de un México poderoso, de manera que el gobierno de aquél país esté las 24 horas pensando cómo dañarnos?
Las prioridades y responsabilidades geopolíticas de Estados Unidos, son otros países y están en otras regiones del mundo. Nosotros, ni de lejos somos su prioridad número uno.
Por eso da risa esa visión que plantea que, desde el momento mismo que toma posesión de la Presidencia el candidato triunfador este martes 8 de noviembre, su única tarea sería dañar a México.
Por favor, este fin de semana esté tranquilo; disfrútelo y gócelo con los suyos y el lunes, regrese a sus actividades habituales y también el martes, el miércoles y así sucesivamente.
Esté atento al daño, tal y como lo han demostrado una y otra vez, que nos pueden causar nuestros políticos, sean éstos gobernantes, funcionarios, legisladores o dirigentes de los partidos políticos.
Ellos, si están dedicados a joder a México, todos los días y de todas formas.
Lo otro, los pronósticos apocalípticos de nuestros analistas chafas, son el perfecto distractor para que por unos días se olvide de los dos Duartes, de Borge, de Medina, de Padrés, de Ávila, de los Moreira y de centenas más de políticos quienes, con la gobernación puesta en práctica durante su encargo, dañaron a México aun estando dormidos.
ebv