¿Tendrá algún efecto en México la decisión que tomará el Presidente Trump, en cuanto al aborto y defensa de la vida?

Una de las reglas no escritas en la política de Estados Unidos en relación con el aborto y la defensa de la vida, es que un Presidente demócrata apoya lo primero y un republicano lo segundo.

Es algo curioso ver cómo, una de las primeras medidas del Presidente entrante, tiene que ver con esos dos temas. Uno, apoya la promoción del aborto y temas relacionados con él, y el otro, hace exactamente lo contrario: recorta lo que va en contra de sus valores morales y religiosos, al tiempo que apoya lo que va en favor de los mismos.

Lo que más llama la atención de esta conducta -en uno y otro caso-, es que los elementos que soportan la decisión nada tienen que ver con cuestiones, por ejemplo, demográficas y sí, totalmente, con los valores morales de cada Presidente.

Pongo el ejemplo de los elementos demográficos porque, no pocas organizaciones de Estados Unidos tienen fuerte presencia en países de varios continentes, sea para promover métodos de anticoncepción y lo que se ha dado en llamar Derecho al Aborto, o para promover la defensa de la vida desde la concepción hasta la muerte natural.

Sin duda, es una perogrullada esto que afirmo pero, hay que repetirlo: no es lo mismo África que Asia o América Latina o Europa, como tampoco es lo mismo una Tasa de Fecundidad menor a 2.1 hijos nacidos vivos por mujer    -durante su vida fértil-, que cifras por encima de 4, 5 o 6 hijos.

Estas últimas cifras las tuvimos en México hace más de 40 años. Sin embargo, en África hoy, en no pocos países se registran Tasas de Fecundidad que rondan esos últimos números.

¿Cómo impactará en México la concreción de la decisión manifiesta de Trump candidato, de apoyar lo que en Estados Unidos se identifica como ProLife, en oposición a Prochoice?

La reducción de los fondos federales a organizaciones afines a los demócratas, ¿cómo se traducirá en México? Por el contrario, la posición de Trump y el apoyo de su gobierno a las organizaciones ProLife, ¿significará su fortalecimiento en México?

Sea cual fuere la posición en cuanto a aportaciones de fondos federales se refiere en Estados Unidos, ¿dónde quedan los elementos demográficos que marcan hoy a la sociedad mexicana?

¿Por qué no promover una discusión amplia del tema demográfico para que, en función de nuestra realidad presente y futura, destinemos recursos para enfrentar los problemas detectados y proponer las soluciones adecuadas?

No olvidemos que cuando los problemas de una sociedad o de grupos diversos en ella, son juzgados a la luz de la ideología o de los valores personales de éste o aquel político, las cosas no terminan bien.

La demografía debe ser tomada en serio; lo que ella nos va diciendo año con año, debe atenderse oportunamente.

Hoy estamos todavía con tiempo, para prestar atención a nuestros problemas demográficos; de tardarnos unos cuantos años más, muy posiblemente lo que hoy podría corregirse, mañana sería imposible.

Dejemos pues a Trump -ya como Presidente-, decidir lo que considere correcto y nosotros, en México, analicemos objetivamente nuestra situación demográfica; determinemos problemas y causas, y propongamos las soluciones adecuadas.

¿Y usted, cuantos hijos tiene? ¿Y cuántos hermanos? ¿Y cuántos tíos maternos y paternos? De las respuestas que dé a estas preguntas, mucho es lo que podría decirse de nuestra realidad demográfica actual.

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