Opinión
¿Dónde quedarían, si las hubiere habido, la objetividad analítica y la valentía cívica para decir las cosas?
Una vez más, hemos dejado ver lo que somos y cómo somos.
Digo esto, al leer y escuchar lo que pretenden ser opiniones fundadas acerca de la remoción del hoy ex fiscal en materia electoral, Dr. Santiago Nieto.
La falta del más elemental rigor en casi todos aquéllos que las emitieron deja ver, lo que sin duda es un nivel de análisis que debería avergonzarnos. Los juicios tremendistas -por no decir amarillistas-, se conjugaban con la ignorancia al no haber leído la parte correspondiente al tema de la remoción (Artículo 18 Transitorio), en el Diario Oficial del 10 de febrero del año 2014.
Sin embargo, desde la seguridad que únicamente puede dar la ignorancia y el afán de figurar, junto con la perversa corrección llevó a más de uno a decir puras tonterías, poco es lo que podremos avanzar en la consolidación y fortalecimiento de nuestra democracia.
Las excepciones a lo anterior fueron eso, excepciones; una, la del colaborador de Excélsior, Dr. Javier Aparicio quien, desde el mismo sábado por la mañana había subido a su Twitter el texto de dicho artículo.
De interesarle, ésta es la liga para que lea el Artículo 18 Transitorio:
http://dof.gob.mx/nota_detalle.php?codigo=5332025&fecha=10/02/2014
Por si no quisiere ir a esa página, transcribo aquí dicho artículo:
DÉCIMO OCTAVO.- A partir de la entrada en vigor del presente Decreto el Senado nombrará por dos terceras partes de sus miembros presentes al titular de la Fiscalía Especializada en Atención de Delitos Electorales de la Procuraduría General de la República. El Ejecutivo Federal podrá objetar dicho nombramiento, en cuyo caso se procederá a un nuevo nombramiento en los términos de este párrafo.
En el plazo de treinta días a partir de la entrada en vigor de este Decreto, el Procurador General de la República expedirá el acuerdo de creación de la fiscalía especializada en materia de delitos relacionados con hechos de corrupción, cuyo titular será nombrado por el Senado en los términos del párrafo anterior.
Los titulares de las fiscalías nombrados en términos del presente transitorio durarán en su encargo hasta el treinta de noviembre de dos mil dieciocho, sin perjuicio de que puedan ser removidos libremente por el Procurador General de la República o, en su caso, del Fiscal General de la República. La remoción podrá ser objetada por el voto de la mayoría de los miembros presentes de la Cámara de Senadores dentro de un plazo de diez días hábiles, en cuyo caso el titular de la fiscalía de que se trate, será restituido en el ejercicio de sus funciones.
Como podrá usted darse cuenta, el hoy ex fiscal pudo ser removido libremente por el Procurador lo que en buen cristiano significaría, ni más ni menos, que la PGR o la Fiscalía no tendría por qué dar explicación alguna de la decisión de removerlo.
Además, el Senado, en caso de no estar de acuerdo con dicha remoción, con sólo el 50% +1 de los senadores presentes en la sesión donde el tema fuere puesto a discusión, podría ordenar su restitución.
Eso es lo que mandata la Constitución; eso fue lo que aprobaron los que hoy se rasgan las vestiduras, desde hace más de tres años.
¿Qué pasará hoy en el Senado? Ni lo sé, ni me interesa; lo que deseo señalar es, simplemente, la falta de ética profesional de los que se lanzaron a opinar desde su total y supina ignorancia del tema.
Desde al sábado, hace tres días, estuve tratando de convencer a quienes interactuaban conmigo en el Twitter, de que leyeran por favor el texto del artículo mencionado arriba; que lo analizaran y entendieran, para evitar confundir a los que confían en ellos por su prestigio, bien o mal ganado, merecido o no.
Los párrafos anteriores explican lo de la falta de objetividad analítica en el título. Ahora voy a lo de la valentía.
Le doy a usted, la liga de una excelente colaboración del escritor español Arturo Pérez Reverte que dice, al respecto, todo lo que yo hubiese querido decir; además, lo dice mucho mejor de cómo lo habría podido decir yo.
Le suplico encarecidamente que lea dicha colaboración la cual, si bien se refiere a la situación que enfrenta hoy España ante la locura populista que los afecta por lo de Cataluña, piense en lo que tenemos en México.
Esta es la liga: http://www.milenio.com/firmas/arturo_perez-reverte_escritoenespana/espana-cataluna-democracia-europa-nacionalismo-himno_nacional_18_1053074718.html
Ojalá y coincidamos en ambos temas porque, sin la obligada objetividad analítica de quienes supuestamente son líderes de opinión, jamás podremos entender las causas de nuestros problemas, menos diseñar las soluciones para enfrentarlos y resolverlos.
En lo de rendirse por la cobardía y la corrección política, lo único que podría decir es esto: Al paso que vamos, México corre el riesgo de convertirse en un país de castrados.
La opinión emitida en este texto es responsabilidad del quien lo emite y no representa la opinión ni la postura de Siete24.mx ni de deportes.siete24.mx