Opinión
Jémez es más peligroso que sus jugadores
Durante toda la semana se habló de Francisco Jémez, técnico de Cruz Azul. Para su mala fortuna, por un tema extra cancha. Nuevamente, su fuerte carácter le jugó una mala pasada al español. Una seña obscena y otra conferencia de prensa muy irritado fue el saldo del empate sin goles ante Toluca del sábado pasado.
Sin embargo, lo que verdaderamente le debería preocupar al estratega de la ‘Máquina’ sigue siendo el futbol de su equipo. Porque desde su llegada a México, el entrenador europeo pregonó un estilo ofensivo y atractivo para el público, pero hasta ahora no lo ha logrado reflejar en los resultados.
Por ejemplo, el torneo pasado fue de los clubes que más veces disparo en la Liga MX, sólo que, con un pequeño detalle, no tuvieron definición. Incluso encabezaron la lista de conjuntos que más tiros a puerta necesitaban en promedio para anotar un gol. Llevamos cuatro fechas y la problemática sigue.
“Hasta ahora habíamos marcado en todos los partidos, ¿qué contundencia? De pasado vamos a tener que marcar seis, siete goles todos los partidos para que estés contento. Pues chico, buscar otro equipo porque no, es no va a pasar”, respondió Jémez en conferencia de prensa tras el empate de la jornada 4 ante los Diablos Rojos.
Con furia, agresividad y certeza, contestó ‘Paco’. Lo mismo que se le debería pedir a su delantera cuando estén en el área rival, ya que potencial tienen. No obstante, de los 31 encuentros que ha dirigido el español en el futbol mexicano (Liga y Copa), solamente en dos de ellos ha marcado más de dos anotaciones. Y todos saben que ‘goles son amores’.
Caso contrario de lo que vivió Jémez cuando dirigió en España. Las cuatro temporadas que comandó al Rayo Vallecano cuentan con mejor promedio de goles por juego que lo que lleva actualmente en 21 partidos de liga con Cruz Azul. Por lo que no hay pretexto, si con un equipo ‘chico’ pudo, con una plantilla poderosa como la ‘celeste’ es obligación.
El timonel de los ‘Cementeros’ tiene mucho trabajo por hacer. Encontrar entre Martín Cauteruccio o Felipe Mora un centro delantero que le reditúe en tantos, recuperar el mejor estado de forma de Ángel Mena, y lograr que Édgar Méndez sea constante en la influencia que tiene en los juegos.
Así, los problemas de ‘Paco’ pasan más porque hasta ahora el más ofensivo y peligroso en la institución cementera ha sido él, y no sus delanteros.
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