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Playas mexicanas, atractivas para surfear
México.— Las playas de Baja California, Riviera Nayarita y Oaxaca, se han convertido en atractivos destinos para los vacacionistas que disfrutan de practicar surf durante el verano.
Esta estación del año se caracteriza por su generoso clima, que permite a los viajeros disfrutar de los destinos de sol y playa para descansar o practicar deportes acuáticos.
Mediante un comunicado, el surfista Bruno Muchada explicó que esta práctica va más allá de un mero deporte, pues implica toda una tradición y estilo de vida, que integra buena compañía y un contacto respetuoso con la madre naturaleza.
Esa esencia lo ha hecho un fenómeno para miles y, en un mundo tan acelerado y abrumador, se convierte en una forma ideal de bajar el ritmo, conectarse con lo que es realmente importante y un descubrimiento para muchos viajeros.
Bruno, de Selina, un concepto de hospedaje especializado en viajeros y nómadas del mundo, compartió que hacer surf es más de lo que se ve en las grandes competencias.
Por un lado es una actividad que exige gran rendimiento físico y disciplina, sin embargo, lo más importante para practicarlo es estar dispuesto a entender y conocer por qué las personas comenzaron a jugar con el mar sobre un tabla.
Su origen exacto no es claro, sin embargo, ha tomado forma entre la culturas de las islas del Pacífico y se demuestra a través de símbolos como el “shaka” (el signo del dedo índice y el meñique levantado), que además de ser un saludo, es una representación de paz, energía positiva y relajación.
En ese sentido, surfear significa que se está preparado para cambiar de actitud, darle la bienvenida a una forma distinta de ver el mundo y crear un lazo especial con las personas con quienes se practica.
La actividad también despierta un espíritu viajero que lleva a los surfistas a conocer más playas y comunidades, ofrece un sentido de identidad y conexión, puede también tener un impacto positivo en las relaciones personales y hasta de trabajo.
México tiene numerosas playas que se han convertido en capitales del surf por su oleaje, desde las costas de Baja California, pasando por Sayulita, en la Riviera Nayarita, hasta playas oaxaqueñas como Zicatela, en Puerto Escondido.