Deportes
El deporte como herramienta social ayuda a fomentar la solidaridad
Ciudad de México,— La práctica del deporte no sólo sirve para construir atletas que obtengan satisfacciones particulares o colectivas en beneficio de una nación. El deporte va más allá en la adolescencia y niñez, fomentar la socialización para trabajar en equipo y forjar lazos competitivos.
Sin perder de vista el principal objetivo de la práctica del deporte en todas las edades, primeramente se busca mantener una salud estable en lo mental y físico.
Con una práctica habitual del deporte se entrena el corazón, el sistema respiratorio, óseo y sanguíneo. Además se favorece el mantenimiento de un buen estado de ánimo.
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Como herramienta de prevención, el deporte ayuda a evitar la obesidad infantil y sedentarismo.
Pero lo más importante es que la práctica de los deportes en equipo fomentan la socialización, ayudan al niño a compartir triunfos y derrotas, a disfrutar de los sentimientos intrínsecos y formar parte de un equipo.
Ganar y perder es parte de la competencia, pero ayudarse en equipo para conseguir un objetivo común es lo que desarrolla la práctica del deporte.
En Barcelona, España, existe una clínica especializada en el desarrollo de los niños a través de la práctica del deporte. La Unidad de Medicina del Deporte del Hospital Sant Joan de Déu en Barcelona, es única, ya que que ofrece atención especializada en niños y jóvenes.
todos aquellos que practican el deporte a nivel escolar, amateur o profesional.
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La clínica aporta conocimiento y soluciones en la práctica de deportes en equipo, running, danza, skateboard, submarinismo, ciclismo, patinaje, artes marciales y otras disciplinas.
La solidaridad y el deporte siempre tienen que ir de la mano, fomentar desde casa el trabajo en equipo entre niños y adolescentes, siempre entregará un funcionamiento más eficaz. Cabe destacar que un trabajo en equipo es la unión de varías individualidades en el beneficio común.
Alguna ocasión, el escritor uruguayo Eduardo Galeano destacaba que “la caridad es humillante porque se ejerce verticalmente y desde arriba; la solidaridad es horizontal e implica respeto mutuo”. Por ello es importante que no confundir ambas.
Los jóvenes deben ser solidarios, ser respetuosos y saberse iguales a los demás, pero nunca por encima, ni mucho menos por debajo. Eso es el trabajo en equipo, rescatar y disfruta los méritos colectivos por encima del talento individual.
Foto cortesía