Cine
Murió Meche Carreño, sex symbol del cine mexicano
Recordada por su sensualidad en pantalla
Ciudad de México.- A los 74 años murió ayer la actriz Meche Carreño en un hospital de los EU al que ingresó con anemia, confirmó hoy su familia.
Nació en Minatitlán, Veracruz, como María de las Mercedes Carreño Nava, y además de actriz fue también guionista y productora, pero es recordada por su sensualidad en pantalla, por lo que es considerada uno de los primeros símbolos sexuales del cine mexicano.
“A fines de los años sesenta surgirían dos figuras que alcanzarían un gran impacto en el inconsciente colectivo, en una época particularmente transgresora: Isela Vega y Meche Carreño, enormes mitos eróticos de ese tiempo, que el cine, la prensa, la televisión y sus seguidores convertirían en leyenda, durante aquellos años de represión social y política”, relata el Festival de Cine de Morelia en su sitio web.
“A diferencia de la voluptuosa Isela, Meche Carreño, era más bien menudita, con cuerpo de adolescente. Una joven de bellos labios, esbeltas piernas y larga cabellera que tuvo la audacia de aparecer retratada en monokini”.
Así nació su carrera
Meche Carreño estudió en la Academia de Actuación de Andrés Soler, colaboró con Alejandro Jodorowsky en un montaje teatral y con Carlos Ancira en la obra El hombre y su máscara. Contrajo matrimonio con el empresario y fotógrafo José Lorenzo Zakany Almada, quien la lanzó al estrellato en esos años sesenta.
Una trama de audaces desnudos, situaciones de enorme violencia y tensión sexual, fue La choca (1973), de Emilio Fernández, en la que Meche tiene un bello desnudo, en un relato de pasiones extremas en la selva oaxaqueña, con la que obtuvo el Ariel a mejor coactuación.
En esos años setenta, los desnudos de Meche Carreño fueron más explícitos, como lo muestra Zona roja (1975), del Indio Fernández.
Lo mejor de la filmografía de Carreño se encuentra en la obra realizada junto con el sensible cineasta Juan Manuel Torres, su pareja sentimental, luego de su divorcio con Zakany.
A su lado, protagonizó una serie de inteligentes relatos cuya temática eran las confesiones íntimas y aspiraciones sentimentales de los jóvenes del momento como lo muestran:
La otra virginidad (1974), La vida cambia (1975), El mar (1976) y La mujer perfecta (1977).
Sus últimas películas fueron Tres historias de amor, El Noa Noa, Es mi vida, Durazo, la verdadera historia y El día de las sirvientas.
En el 2009 el Festival Internacional de Cine de Guanajuato (GIFF) le entregó la Cruz de Plata en reconocimiento a su carrera.
Con información del GIFF y Morelia Film Fest.
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