Celebridades
‘Guardianes de la Galaxia, Volumen 2’
No hay duda que el factor nostalgia es el arma más poderosa para los realizadores de ‘Guardianes de la Galaxia Volumen 2’ (2017), siguiente aventura de aquella que vimos hace tres años y que nos capturó por lo mismo usar personajes futuristas que un soundtrack de clásicos de los años 60 y 70.
En este regreso de Peter Quill/Star-Lord con la alienígena de piel verde Gamora (Zoe Saldana), el guerrero grandulón Drax (Dave Bautista), el mapache renegado Rocket (voz de Bradley Cooper) y el regenerado Baby Groot (voz de Vin Diesel), la historia se dedica a amarrar algunos cabos sueltos que quedaron de la cinta antecesora, aclarando sobre todo el pasado de varios de sus personajes.
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El argumento en pantalla del propio director James Gunn, sucede para que compartamos un par de horas con la tripulación liderada por Quill. Su dinámica es estarse dándose de zapes y picárse las costillas, mientras que –tal como sucediera en la película original- se crean situaciones tipo “sketch” con el mero objetivo de provocar la risa en el espectador.
La comedia de los Guardianes parece desprendida más de un patio de secundaria, que de un lugar con mayores pretensiones intelectuales; pero se sostiene por el carisma de los personajes y la evocación constante de sentimientos por medio de las canciones que Gunn como realizador eligió.
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Así, la experiencia de ‘Guardianes de la Galaxia Volumen 2’ se acerca a aquellos que gustaban comprar discos de vinil –yo me apunto entre ellos- y tirarse en el sofá con la carátula del LP para evocar imágenes en nuestra imaginación.
Si el filme del 2014 funcionó por la novedad de combinar humor y nostalgia, además de personajes desenfadados, que prácticamente nadie conocía, ahora el reto del ‘Volumen 2’ es mantener esa frescura. Reto que en ocasiones no se cumple, porque finalmente estos personajes ya tienen una manera de comunicarse e interactuar que nos quedó muy clara en su primera aventura.
El lado que flaquea el ‘Volumen 2’ es que la anécdota es muy corta y sólo es un pretexto para lidiar con situaciones que nos gustaría ver a los personajes. Aquí la aventura sólo es una excusa, lo importante son las reacciones de los personajes a predicamentos familiares que pondrán en jaque a su corazón sobre dónde está su lealtad.
Quill conoce a su padre, Ego (Kurt Russell), quien se aparece para decir que: “no estaba muerto…”, sino fungiendo como una especie de deidad de un planeta que necesita sus poderes e imaginación para existir. Ahí, el también llamado Star-Lord es invitado a ocupar el lado derecho del trono y forzado a tomar una decisión que podría cambiar el futuro de los Guardianes.
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No muy lejos de ahí, Gamora lidia un duelo con su media hermana Nebula (Karen Guillian), teniendo que resolver sus asuntos del pasado, producto de tener un padre adoptivo villano y abusivo, pero también de decisiones no generosas que ambas tomaron.
Así que esta nueva película de los estudios Marvel concentra sus baterías en la historia familiar, consiguiendo momentos incluso muy emotivos que muchos jamás hubieran sospechado se podrían desprender de estos personajes de aspecto alienígena.
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En sus mejores momentos ‘Guardianes de la Galaxia Volumen 2’, funciona como la gran excusa para el baño de nostalgia, cuando la paleta de nuestra imaginación estaba saturada de colores, mujeres y guerreros espaciales y música donde la guitarra y el bajo marcaban la emotividad de un pedacito de magia.
Si bien no estamos ante una cinta que será recordada por su historia, bien podremos colocarla en la repisa de nuestra música de catálogo, donde las memorias se desprenden con tan sólo soplar el polvo y una pequeña figura llamada Baby Groot podría estarnos sonriendo en la mera esquina.
Porque el cine es para siempre…