CDMX
Arquidiócesis de México convoca a los peregrinos a orar por católicos con escasa coherencia religiosa
Ciudad de México.— La Arquidiócesis Primada de México ha lanzado un llamado especial a los peregrinos que se encaminan hacia el encuentro con la Virgen Morena, ya sea a pie, en bicicleta, motocicleta, autos particulares, transporte colectivo, a caballo, autobuses o camiones de redilas, para que ofrezcan a la Virgen sus pasos hacia el Tepeyac, su cansancio, dolores, enfermedades y oraciones, en busca de la paz en México y el mundo.
A través de la editorial en Desde la Fe de la Arquidiócesis de México, se recordó que millones de fieles peregrinan en estos días a la Insigne y Nacional Basílica de Guadalupe para conmemorar el Aniversario 492 de las Apariciones de la Madre de Dios en el Tepeyac, llevando consigo innumerables peticiones y agradecimientos por los favores recibidos.
En un llamado a la acción, se destacó el mensaje del Papa Francisco sobre la “tercera” guerra mundial, instando a los devotos guadalupanos a convertir este viaje al santuario mariano de la Ciudad de México en una expresión de fe en Jesucristo y veneración a la Virgen de Guadalupe. Además, se animó a que esta peregrinación sea una respuesta a la solicitud del Papa de orar por la paz en este momento crucial de la historia.
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En consonancia con este propósito, se hizo un llamado a dirigir oraciones a Santa María de Guadalupe por aquellos católicos cuya coherencia con las convicciones éticas y religiosas propias del magisterio es escasa. Desde líderes mundiales hasta las bases sociales, se enfatizó la importancia de la coherencia como clave para vivir en sintonía con la esencia y en paz con los demás.
La Virgen de Guadalupe fue destacada como la gran conciliadora, y se recordó que es de su mano como se puede convertir en grandes artesanos de la paz mundial, comenzando en las familias y el país, hoy afectado por la violencia y la inseguridad.
Finalmente, se proyectó hacia el futuro, mirando hacia el año 2031, cuando se celebrarán los 500 años de las apariciones a San Juan Diego, con un llamado a trabajar para entregarle a la Virgen una humanidad en paz, reconciliada y hermanada. Se instó a todos a contribuir en sus entornos para hacer realidad este deseo que anida en el corazón guadalupano del pueblo mexicano.
ebv