Violencia contra la mujer y bajo nivel de escolaridad, factores determinantes en la mortalidad materna

México.— El MELISA Institute llevó a cabo la presentación del estudio científico “¿Cómo reducir la mortalidad materna en México?”, encabezada por su Director de Investigación, el Profesor Elard Koch, quién es epidemiólogo molecular, doctor en Ciencias Biomédicas por la Universidad de Chile e investigador postdoctoral para el Women Research Program de la Universidad de Carolina del Norte.

El estudio “¿Cómo reducir la mortalidad materna en México?”, elaborado en colaboración con la UNAM y diversas universidades de los Estados Unidos, señala que más allá de la legalización del aborto o no, situación que aseguran no cuenta con datos que confirmen que incide en el aumento o disminución de la mortalidad materna, hay factores que realmente tienen repercusión en el caso mexicano, como son la violencia ejercida contra la mujer, los bajos niveles de escolaridad en algunos estados del país, así como la falta de drenaje y agua potable en casa.

De acuerdo con el estudio, se confirmó que mientras el nivel educativo de las mujeres en edad reproductiva es más bajo, mayor es el riesgo de muerte durante el embarazo, parto y post-parto.

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En el estudio de los 32 estados de la República mexicana, la baja alfabetización de la mujer, explicó entre el 11.9 y 50.9% de las muertes maternas reportadas. En México las tasas de alfabetización varían dependiendo el estado, entre el 77.5 y el 96.5%.

El estudio señala un impacto directo en la reducción de la mortalidad materna, asociado al mayor nivel de escolaridad de las mujeres, ya que esto impacta positivamente otros factores como el acceso a cuidados prenatales, atención profesional en el parto y cuidados de emergencia cuando ocurren complicaciones durante el embarazo.

En este caso la recomendación es, sobre todo en estados con los más bajos niveles de escolaridad, generar un aumento de al menos el 5% en las tasas de alfabetización, lo que evitaría la muerte de entre cinco y diez mujeres por estado. Obviamente lo ideal sería la generación de políticas públicas a fin de erradicar el analfabetismo, lograr una matrícula escolar universal para mujeres y niñas.

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En lo que toca al tema de la violencia ejercida contra la mujer, el estudio señala que la violencia física durante el embarazo es uno de los factores que aumenta el riesgo de complicaciones por golpes y lesiones que pueden generar hemorragias y una labor prematura de parto.

Las mujeres afectadas por este fenómeno sufren frecuentemente barreras para acceder a un buen control del embarazo. En el estudio de las 32 entidades, la violencia contra la mujer fue identificada como un factor que influye en la mortalidad materna global y en la mortalidad relacionada con el aborto.

Se estima que entre el 2.8 y 7.2% de las muertes maternas en los estados del país, pueden estar relacionadas con eventos de violencia. En México la violencia varía desde un 6.3% en Oaxaca, hasta el 20.9% en la Ciudad de México.

En este caso la recomendación es la implementación de programas de detección de violencia desde las visitas prenatales y en las visitas subsecuentes a fin de ubicar este fenómeno a tiempo para mejorar la salud materna.

Otro de los factores determinantes de la mortalidad materna en México, es el acceso a los servicios de agua potable y drenaje, ya que la carencia de éstos, representan un riesgo para la salud materna.

Las cifras señalan que mientras menor es el acceso al agua limpia y servicios de drenaje, mayor es el número de muertes durante el embarazo. Las condiciones de higiene deficientes pueden conducir a la sepsis puerperal, una de las principales causas de muerte materna evitable. Además la exposición a una mala calidad de agua y alcantarillado, aumenta la posibilidad de infecciones de largo plazo, lo que debilita la salud femenina en edad fértil.

En este caso la recomendación es poner especial énfasis en el suministro de agua potable y alcantarillado. La menor cobertura en algunos estados de este servicio es del 62%, mientras que la mayor cobertura es de 99.2%.

Entre los factores determinantes para la mortalidad materna se encuentran también el acceso a la Atención obstétrica de emergencia, Cuidado prenatal y atención profesional del parto, Embarazos de alto riesgo y bajo peso al nacer, y Fecundidad y postergación de la maternidad.

Los estados con menor mortalidad materna son Nuevo León, Sinaloa y Colima, siendo la postergación de la maternidad y la violencia contra la mujer, factores determinantes en las defunciones. En contraparte, Guerrero, Chihuahua y Oaxaca, son los estados con mayor mortalidad materna, siendo Guerrero el estado con mayor índice de muertes con 64.4 mujeres por cada 100 mil nacidos vivos, como consecuencia de hemorragias, baja atención obstétrica y profesional, así como que el 38% de los hogares no cuentan con agua potable.

JFM