Desde Kazajistán, Papa Francisco defendió la libertad religiosa

Kazajistán.— El Papa Francisco inició su “peregrinación de paz” por Kazajistán. El Santo Padre Francisco arribó a la República de Kazajistán luego de unas 6 horas de viaje desde El Vaticano.

En el vuelo lo acompañaron cerca de 80 personas, entre periodistas, técnicos, fotógrafos, camarógrafos de diversos medios de comunicación.

Este 38º viaje apostólico, efectuado en el marco del séptimo Congreso de Líderes de Religiones Mundiales y Tradicionales, es “una oportunidad para encontrar a tantos representantes religiosos y dialogar como hermanos, animados por el deseo común de paz, paz de la que nuestro mundo está sediento”, expresó el Pontífice.

Tras realizar la visita de cortesía al Presidente de la República, el Papa Francisco tuvo un encuentro con las autoridades, la sociedad civil y el cuerpo diplomático de Kazajistán, a quienes habló acerca del propósito de su viaje: ser peregrino de paz.

En su primer discurso en la “Sala de Conciertos Qazaq”, el Papa Francisco explicó que ha viajado hasta el país de Asia Central “como peregrino de paz, en busca de diálogo y unidad”.

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Habló ante las autoridades del “dombra”, un instrumento musical tradicional de Kazajistán, y lo tomó como ejemplo para explicar la importancia de “no descuidar los vínculos con la vida de quienes nos han precedido”, frente a los rápidos cambios sociales y económicos.

“Una laicidad sana, que reconozca el rol valioso e insustituible de la religión y se contraponga el extremismo que la corroe, representa una condición esencial para el trato equitativo de cada ciudadano”, señaló.

Asimismo, expresó su aprecio por la afirmación del valor de la vida humana mediante la abolición de la pena de muerte, en nombre del derecho de todo ser humano a la esperanza.

ebv