Mundo
Francisco exhorta a cuestionarse si se es “discípulo de las habladurías”
Ciudad del Vaticano.— Durante la celebración del Ángelus a tres días de las exequias de su predecesor, el papa Francisco pidió a los creyentes a reflexionar si la actitud personal de algunos es la deseada como un “discípulo de Jesús” o si se cae en la tentación de ser un “discípulo de las habladurías”.
“Nosotros, discípulos de Jesús, estamos llamados a ejercer la justicia así, en las relaciones con los demás, en la Iglesia, en la sociedad: no con la dureza de quien juzga y condena dividiendo a las personas en las buenas y en las malas, pero con la misericordia de quien acoge compartir las heridas y fragilidades de las hermanas y hermanos”, dijo el pontífice.
Y llamó a la reflexión: “Preguntémonos: ¿Soy una persona que divide o que comparte?”
En su alocución, Francisco aleccionó sobre la idea de la justicia desde la perspectiva del creyente y cómo ésta no suele asemejarse con la del mundo:
“Muchas veces tenemos una idea estrecha de la justicia; pensamos que significa que aquel que se equivoca debe pagar y sólo así repara el mal que ha hecho. Pero la justicia de Dios es mucho mayor: su finalidad no es la condenación del culpable, sino su salvación y su renacimiento, haciéndolo justo”.
Francisco destacó que la justicia cristiana “nace del amor” y de una “profundidad de compasión y misericordia”, porque “es el corazón mismo de Dios Padre que se conmueve cuando somos oprimidos por el mal y caemos bajo el peso de los pecados y debilidades”.
El Papa también compartió que, previo al saludo a los peregrinos reunidos en la Plaza de San Pedro, había presidido la ceremonia del sacramento del Bautismo a trece bebés, hijos de trabajadores de la Ciudad del Vaticano.
A sus padres, como a los fieles católicos, los exhortó a recordar y celebrar el día de sus propios Bautismos: “No olvidemos cuando fuimos bautizados. Es como un cumpleaños, porque el Bautismo nos hace renacer a la vida cristiana. Por eso, les aconsejo que les enseñen a sus hijos la fecha del Bautismo, como un nuevo cumpleaños: que cada año se acuerden y den gracias a Dios por esta gracia de haberse hecho cristianos. Esta es una tarea que les recomiendo hacer”, dijo a los padres de los bebés bautizados. Y al pueblo reunido en la Plaza de San Pedro les encomendó lo mismo.
Finalmente, al reconocer algunas banderas polacas y ucranianas entre los fieles presentes en el Ángelus, el papa Francisco pidió oraciones por las madres de los soldados caídos en la guerra en el este europeo. Pidió rezar por las madres de soldados rusos y ucranianos que se encuentran en la guerra o que, por causa de ésta, han perdido la vida.
El domingo 8 de enero, la Basílica de San Pedro abrió oficialmente el acceso a la tumba del papa Benedicto XVI para la asistencia de los fieles y peregrinos.
Información de Felipe Monroy / Director de VCNoticias
ebv