Análisis y Opinión
Crecimiento exponencial de contagios en cuarta ola de Covid ¿y qué?
Nigromante
Antes de que en la semana de Reyes Magos se contabilizaran 300 mil fallecidos por Coronavirus -las defunciones totales incluyendo las sospechosas llegaron a 313,615- los contagios aumentaron en una semana en México 243 por ciento al pasar de 4 mil 426 en un día del martes 28 de diciembre a 15 mil 184 casos positivos por el virus el 4 de enero, lo que representa la mayor aceleración de la pandemia en México. Para la noche del 6 de enero rebasaron los 25 mil 821 contagios en 24 horas.
A todas luces se configura ya una cuarta ola de contagios por Coronavirus que el presidente Andrés Manuel López Obrador niega junto con su estratega nacional de la pandemia, Hugo López Gatell, quien por cierto no acudió a la conferencia de prensa matutina para informar sobre el avance de contagios, hospitalizaciones y fallecimientos por reportarse enfermo “de una gripa”.
Ni López Obrador ni López Gatell usan cubrebocas ni guardan la sana distancia ni han determinado medidas restrictivas en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México porque ni en este país se han impuesto medidas preventivas para evitar que quienes llegan de otros países provoquen la expansión de la pandemia en México, como tampoco lo hacen en Colombia, donde tampoco hay restricciones. Son los dos países de América en que no hay restricciones.
Las razones son obvias y fueron expresadas desde octubre en que se avanzó en la vacunación en México de que se trata de reactivar el turismo, la industria más golpeada por la crisis económica generada por la pandemia, se han abierto las puertas a todos los visitantes a los centros turísticos incluyendo a quienes llegaron procedentes de Sudáfrica, y que trajeron la nueva variable Ómicron. O sea, se puso por delante la recuperación económica antes que la salud.
La actitud del gobierno, en específico del sector Salud, se presume de irresponsabilidad al no tomar cartas en el asunto para aminorar los daños de la pandemia que está generando daños a la salud también de los niños, según han reportado los especialistas que atienden la emergencia en los hospitales.
Se han difundido imágenes en videos en que se atiende a un creciente número de menores y especialistas que están en la primera línea refieren que a diferencia de las tres olas anteriores de Covid, en esta cuarta ola son los niños los que están siendo más afectados a pesar de las sesudas declaraciones de López Gatell, quien niega “evidencias científicas” –así lo dijo- de que el Covid afecta a los niños, que es el sector al que se está negando la vacunación, menos a los que lograron un amparo gracias a la iniciativa de sus padres que tuvieron que acudir a la demanda de amparos que han sido favorables para que sean vacunados los menores de 12 años.
Mientras que en Estados Unidos y países de Europa se anuncian jornadas de vacunación a los niños de 5 años en adelante, pues los contagios de menores se dispararon en esos países igual que en México, donde todavía no se conoce una estrategia que incluya la vacunación a los menores hasta que López Gatell encuentre “evidencias científicas” que justifiquen la medida. Pero como se halla en reposo gripal, todavía no se sabe hasta cuándo se procederá a atender a los niños contagiados.
La mañana del viernes 7 de enero el presidente López Obrador respondió escuetamente que ya se atiende el avance de esta cuarta ola en la que no se han generado mayores hospitalizaciones ni tampoco fallecimientos, puesto que hay una hospitalización de 19 por ciento y una ocupación de camas con equipos de respiración mecánica de 14 por ciento de las disponibles.
“Estamos pendientes del desarrollo de esta cuarta ola –esta vez la reconoció como tal- que no ha generado mayor hospitalización ni fallecimientos como en meses anteriores, para que no nos rebase en la capacidad hospitalaria ni atención médica”, dijo, pero no detalló las medidas preventivas para detener el crecimiento exponencial de los contagios, pues tampoco se ha hecho campaña para frenar a las multitudes sin cubre bocas ni sana distancia que invaden los centros comerciales y espacios públicos.
No parece llamar la atención del presidente López Obrador que se han relajado las medidas preventivas de la gente y sólo se refiere al “pueblo bueno” que “está muy despierto” y consciente de sus derechos civiles a la hora de votar, por lo cual tiene la seguridad de que acudirá masivamente a votar por la revocación de mandato. No presiente ningún riesgo, porque las encuestas lo reportan con más de 60 por ciento de popularidad, así que no votarán para que deje la Presidencia en abril. En eso confían sus estrategas políticos.
La opinión emitida en este artículo es responsabilidad del autor y no necesariamente refleja la postura de Siete24.mx