Opinión

El cine del eclipse de 1979 

Publicada

on

Contraluz

Era un lunes de febrero 26 de 1979, cuando la luna se alineó frente al sol para proyectar su sombra en la Tierra. La película que dominaba la taquilla internacional era ‘Superman’, estrenada apenas en diciembre de 1978 y con un Christopher Reeve que su última toma fue terminarnos de convencer que un hombre podía volar, sobrevolando precisamente nuestra esfera azul, con un astro rey frente a él. 

Ese 1979, revelándose la ansiedad de fin de la década, se estrenó ‘Alien: el octavo pasajero’ con Ridley Scott como director, abriendo el telón a su casa embrujada espacial con un objeto celeste que eclipsa una luz brillante de la que desconocemos su procedencia. Antes y después, el negro del espacio y sus estrellas solitarias, estaban puestas para invocar la inmensidad y soledad de lo que existe fuera de nuestra atmósfera. 

La misma posibilidad de viajar a las estrellas fue aprovechada por el creador y productor Gene Rodenberry, cuando catapultó a su nave Enterprise a una nueva misión en ‘Star Trek: the motion picture’, demostrando que había miles de aficionados de la serie de televisión de finales de los años 60, que querían seguir las aventuras del Capitán Kirk y el vulcano Spock. 

Y sin quererse perder la fiesta espacial, el mismo James Bond, tuvo su odisea en ‘Moonraker’,  historia que autor Ian Fleming desde que escribía la novela del mismo nombre en 1954 ya ambicionaba como un filme de ciencia ficción.  De ahí surgió ver al 007 de Roger Moore, como el agente del MI6, quien termina desafiando al villano Drax y su aliado Jaws en gravedad cero. 

Y mientras la modelo Lois Chiles era la chica Bond, allá abajo, corriendo en la playa Dudley Moore se fascinaba contemplando en cámara lenta a Bo Derek en ’10: la mujer perfecta’, volviéndose la escultural rubia californiana el estándar inalcanzable de belleza. 

Del otro lado del océano, las costas de Vietnam eran bombardeadas con helicópteros de guerra estadounidense que se volvían las Valkirias en ‘Apocalipsis Ahora’, estrenada en mayo del 79 y ganando la Palma de Oro, mientras su director Francis Ford Coppola anunciaba: “mi película no es sobre Vietnam, es Vietnam”. En abril, se premiaron con el Oscar de la Academia, dos filmes más sobre Vietnam: ‘El francotirador’ y ‘Regreso sin gloria’, ambos entre lo mejor de 1978. 

La realidad también azotó ese fin de década a la psique del mundo, cuando ‘Kramer vs Kramer’ con Dustin Hoffman y Meryl Streep reveló los estragos de un matrimonio recién divorciado y los retos de la emancipación de la mujer con su búsqueda de hacerse valer a sí misma más allá del rol de esposa y madre. 

‘Rocky II’, secuela de la ganadora del Oscar que puso a Sylvester Stallone en el mapa del mundo, trajo el optimismo al calendario de 1979, dándole la revancha al héroe que había perdido en ‘Rocky’ (1976). Aún faltaban dos años para que Ronald Reagan tomara la presidencia y que el último zarpazo a la guerra fría se diera, pero la música de Bill Conti y el héroe de boxeo de Sly estaban ahí para invitarnos a creer que todo sería distinto. 

Casi 4 décadas después, los astros siguen girando, el cine evolucionando y la sociedad aún prendida de la pantalla, que aunque es digital, sigue alimentándose de la luz que pongamos en ella.  

Porque el cine es para siempre… 

haga clic para comentar

Te Recomendamos

Salir de la versión móvil