Laboratorio de Ideas
Los webinars y las conferencias en línea nos saturan
Últimamente, la oferta de conferencias en línea o webinars se ha incrementado dramáticamente, al grado de saturar las redes sociales con invitaciones para eventos de todos los temas empresariales. Sin duda derivado de la crisis por esta pandemia, los profesionales independientes, las pequeñas empresas o los profesionistas que se han quedado sin empleo, han visto en este mecanismo una oportunidad para tratar de posicionarse como expertos en algún tema en particular, ofreciendo pláticas y seminarios incluso sin costo. Esto de verdad que me encanta.
Me encanta porque, aún y cuando haya sido por una necesidad a consecuencia de la crisis, las personas nos hemos dado cuenta de que siempre tendremos un punto de vista sobre algún tema que seguramente será de mucho valor para alguien más, y hemos decidido compartirlo. No se trata de tener que ser expertos para atreverse a hablar con autoridad sobre un tema, simplemente se trata de identificar algún aprendizaje que para nosotros haya sido valioso y que, por ese simple hecho, valga la pena compartir con los demás.
En 2011, cuando comencé a escribir mi primer libro, tomé la decisión de que sería un libro 100% basado en mi experiencia de tantos años trabajando y colaborando para diferentes empresas, sin preocuparme por hacer ningún tipo de investigación bibliográfica que sustentara mis palabras. La razón era que para mí, era mucho más valioso compartir lo que había aprendido en el campo de batalla, con hechos reales, en situaciones reales, con empresas reales y sobre todo que funcionan en la cultura de nuestro país, que hacer un compendio de investigadores o profesores que pocas veces o nunca, se habían enfrentado en la realidad a los problemas de las empresas. Investigadores como el gran gurú de las reingenierías de procesos, que nunca rediseñó ni documentó algún proceso por sí solo, antes de escribir su libro; o el creador de la metodología de gestión del cambio que vende certificaciones en todo el mundo, quién nunca diseño y ejecutó un plan de gestión del cambio en algún proyecto real para algún cliente antes de emprender lo que ha sido un gran negocio.
Aun así, algunos me cuestionaron el hecho de no incluir referencias bibliográficas o no mencionar a otros autores; mi respuesta siempre fue que en el libro traté de compartir mi experiencia y mis aprendizajes tal y como yo los entendí, y para ello, no necesitaba que ningún autor avalara nada de lo que yo había dicho.
Yo siempre he pensado que el ser humano ha evolucionado gracias a que nuestros antepasados decidieron compartir su experiencia y conocimiento con otros. Conozco a grandes profesionales en muchos ámbitos del mundo empresarial, personas brillantes en sus áreas de especialidad, líderes que han conformado grandes empresas y siempre les he pedido que compartan su conocimiento, que escriban un libro o al menos algunos artículos, o que den clases en alguna Universidad, lamentablemente muchos me dicen que no tienen tiempo, que escribir no es para ellos, o cualquier otra razón que pudiera resultar válida, pero que en el fondo, nos condena inevitablemente a tener que prescindir de ese conocimiento y experiencia que se irá con ellos cuando partan de este mundo.
Lo que yo hago todas las semanas utilizando este espacio que amablemente me han prestado, es simplemente compartir mi punto de vista sobre los temas que vivo día con día con mis clientes y con mis colegas, siempre hay profesionales con mayor conocimiento y dominio de los temas sobre los que escribo, pero considero que mi punto de vista es lo suficientemente valioso como para poder ser compartido también.
Ustedes que amablemente me leen, seguramente también leen y obtienen puntos de vista de otros profesionales e internamente analizan y descartan lo que a ustedes, con base en su experiencia, les hace o no sentido y lo aplican en su trabajo. Ojalá ese análisis que forma su punto de vista, también lo puedan compartir con los demás, de esa manera, lograremos evolucionar más rápido este mundo tan apasionante que es, “el mundo interno de las organizaciones”.
Enhorabuena para todos los que han decidido compartir algo de su conocimiento y experiencia, ojalá después de la crisis esto permanezca y se convierta en un hábito. Para los que aún dudan, o lo están pensando, de verdad les digo que cualquier aprendizaje es súper valioso y se debe compartir. No necesitas ser experto, no necesitas fundamentar tus teorías con las de los demás, tan solo comparte lo que aprendiste tal y como lo piensas y verás que alguien, en alguna otra empresa, te lo agradecerá y le harás la vida un poco mejor a él y a las personas que trabajan con él.
Sugerencias y comentarios en Twitter: @gemedinaro