México
“La Tierra es el lugar providencial de nuestra vida”: Pastoral de Pueblos Originarios
Ciudad de México.— La Pastoral de Pueblos Originarios y Afromexicanos hizo un llamado a cuidar de la tierra y consideró necesario recordarnos que la vida y el sustento de la humanidad, y de todos los seres vivos, dependen completamente de los recursos y de los nutrientes que ofrece la Madre Tierra y que gracias a la fertilidad de su suelo recibimos “nuestro pan de cada día”.
“No cabe duda: la Tierra es el lugar providencial de toda nuestra vida. Ella es sacramento del Hacedor y Conservador de la vida, de Ipalnemohuani, ‘Aquel por quien vivimos’”, señaló en el marco del Día Internacional de la Tierra,
Dijo que en la tierra se revela Dios como Nuestra Dignísima Madre, Tonantzin. Por eso es que cuando se pregunta en las comunidades indígenas sobre el color de la piel de Nuestra Señora de Guadalupe, los pueblos originarios responden sin dudar que su piel es “color de la tierra”, lo cual refleja una visión profunda de fe.
“Sin duda los pueblos originarios mantienen con la tierra una relación mística, y con razón todos estos pueblos, a la tierra la consideran su Madre. Las “Palabras Antiguas” (Huehuetlahtolli) de los pueblos originarios coinciden en que el origen primordial de la humanidad es la tierra. Los indígenas son tierra que se ha vuelto carne, huesos, sangre. Por esto hay en las comunidades indígenas un amor entrañable a la tierra y un profundo respeto ecológico y sagrado”.
La tierra para los pueblos originarios es un espacio religioso, un locus theologicus, y no solamente un territorio geográfico y menos aún un medio de producción y explotación.
Los pueblos originarios mantienen cotidianamente relaciones místicas con la Madre Tierra, porque en ella recrean sus mitos creacionales; en ella se encuentra la raíz y el ombligo de su origen, de su historia; en ella recrean sus celebraciones, sus fiestas, sus anhelos, sus utopías; en ella construyen las esperanzas de “una Tierra sin males”, de la “Tierra Florida”, de “Cielos nuevos y Tierra nueva”, en ella cimientan sus luchas y su identidad, diciendo: “somos agua, aire, tierra y vida del medio ambiente creado por Dios.
Por todo esto, pedimos que cesen los maltratos y el exterminio de la Madre Tierra. La tierra tiene sangre y se está desangrando, las multinacionales le han cortado las venas a nuestra Madre Tierra”.
ebv