México
“Libertad de expresión y creatividad artística nunca deben ser utilizadas para denigrar o ridiculizar las convicciones religiosas”: activistas
Ciudad de México.— Integrantes de Activate.org.mx y sociedad civil entregaron más de 8 mil 700 firmas a la oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos en México para exigir se detengan actos de discriminación y burla religiosa.
Asimismo, consideraron que durante la inauguración de los Juegos Olímpicos de París 2024 el Comité Olímpico realizó un performance burlándose de “La Última Cena”.
Se solicita a la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas que se escuchen y se hagan valer las firmas presentadas para que se posicioné, intervenga y se sancione a los responsables de esta provocación.
“Pedimos que se aseguren los derechos humanos de los cristianos y que no sigan siendo vulnerados a nivel internacional. El arte y la expresión artística se deben utilizar de manera respetuosa y constructiva”.
Detallaron que el performance aprobado por el Comité Olímpico Internacional, consistió en un espectáculo de Drag Queens que simulaba la obra de “La Última Cena” de Leonardo Da Vinci, un pasaje bíblico que representa el inicio del momento más doloroso e importante en la fe de millones de cristianos en el mundo.
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Este tipo de actos representa, dijeron, es una clara vulneración al derecho humano de la libertad religiosa, derecho que está reconocido en el artículo 2 y artículo 18 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, así como en el artículo 18 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos.
“La libertad religiosa no es un privilegio, es un derecho inalienable que debe ser protegido y respetado en todas las circunstancias”, declaró Hugo Rico, vocero de Actívate y exhortó a no permitir que eventos internacionales que deberían ser un símbolo de unidad y respeto, se conviertan en plataformas para atacar nuestras creencias y valores.
A pesar de que organizadores de la inauguración, el director artístico del performance, aseguraron que nunca fue su intención burlarse de la fe cristiana y que “supuestamente” su obra se basaba en la pintura “La Fiesta de los Dioses”, pintada por Jan van Bijlert, esta obra también fue creada en su momento como una burla a las imágenes cristianas de la época.
Al respecto, Adrián Martagón, artista y vocero de Actívate declaró: “La libertad de expresión y la creatividad artística son pilares fundamentales de una sociedad libre y diversa, pero nunca deben ser utilizadas para denigrar o ridiculizar las convicciones religiosas de las personas”.
Los activistas declararon que este tipo de acciones y supuestas expresiones artísticas están vulnerando cada día más el derecho a la libertad religiosa, tan sólo en junio pasado, durante la Marcha del Orgullo LGBT en Ciudad de México, un grupo de manifestantes hizo burla de la crucifixión de Cristo, denigrando la fe católica.
Mientras organismos como el Comité Olímpico Internacional permite la burla por parte de una agenda progresista, castiga a otros grupos como el caso João Chianca, surfista que participó en París 2024, a quien se le obligó a borrar de su tabla una imagen del Cristo del Corcovado, símbolo cultural y representativo de su país.
ebv