IEPS a gasolina… para pagar deuda

¿Por qué tanta insistencia en llamar subsidio, a lo que no lo es? ¿Ignorancia y falta de honradez intelectual, o también corrupción?

Espero, esta vez, que más personas se den cuenta que eso de que apenas a partir de este 1 de enero han desaparecido los subsidios a los precios de los combustibles, es una engañifa de este gobierno para ocultar, que el problema es el costo financiero de la deuda y para contribuir a su pago, deben sacarnos dinero con el IEPS. Al tema pues.

Algo que debe sorprender, sin duda, a quienes desde el exterior -fuere desde otro país u otro plantea-, siguen sistemáticamente el comportamiento de la economía mexicana y de nuestras finanzas públicas, es la insistencia de no pocos sedicentes analistas y funcionarios, en llamar a la reducción de un impuesto fijado por la autoridad (En este caso, el IEPS a los combustibles), un subsidio.

¿Se debe a la ignorancia de esos analistas, incapaces de ir a buscar un texto relacionado con políticas fiscales, para darse cuenta que una cosa es una reducción o un alza de un impuesto -monto y/o tasa-, y otra muy pero muy diferente, un subsidio?

Por otra parte, si no fuere la ignorancia la causa de tal desatino conceptual, ¿cuál sería entonces? ¿La falta de honradez intelectual del sedicente analista, o la pereza intelectual del que en verdad parece analista?

¿Y qué tal si la causa no estuviere entre las arriba mencionadas? ¿Cuál podría ser? ¿El que fuere portavoz de la dependencia que insiste, una y otra vez, en mantener la posición errónea de calificar la reducción de un impuesto como subsidio?

Le doy aquí la liga a un excelente artículo de Salvador Kalifa, aparecida este 26 de enero en Reforma donde, de manera lúcida y clara, trata el tema:

http://www.reforma.com/aplicaciones/editoriales/editorial.aspx?id=105825&po=4

Ahora bien, ¿qué hacer con la autoridad y sus funcionarios -en este caso, la SHCP, y quienes de su personal salen a los espacios mediáticos-, que reiteran hasta el cansancio, con posiciones que únicamente buscan esconder el hecho, de que estamos frente a una simple y muy conocida reducción de un impuesto?

Es tal su renuencia, que para no aceptar la única salida correcta, repiten que se trata de un estímulo fiscal y también, ante ese absurdo, que dado que hubo ingresos más altos de lo proyectado por aquí y por allá, el precio máximo de los combustibles permanecerá igual una semana más.

¿Cuál es la realidad? Algo tan simple como esto: El primer factor de la fórmula (Precio de Referencia), bajó por una paridad Peso-Dólar menor, y por un precio menor del Barril de la Mezcla Mexicana de Petróleo (BMMP); pero, para no reducir el precio máximo, elevan el IEPS que cobraron la semana del 4 al 10 de febrero de este año.

En cristiano: Para no reducir el Precio Máximo de los Combustibles por la reducción del Precio de Referencia y así favorecer el consumidor, le suben el mismo monto al IEPS y, como siempre, el ganador único es el Gobierno Federal.

¿Y a ésta manipulación de los precios de los combustibles le llaman liberación? ¡Qué desvergüenza!

¡Y lo peor! Nadie osa protestar, o al menos, ¡exhibirlos! De ahí el daño que causan los sedicentes analistas por hacerse eco de la tergiversación -vil chapuza-, que hace la SHCP.

Y el daño mayor, el de los que sabiendo que Hacienda está mintiendo, callan con un silencio cómplice.

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