Niña prodigio ha leído más de mil libros

EU.—  Una niña a su corta edad ha leído más de mil libros; el primero lo terminó de leer cuando tenía casi tres años.

Haleema, la madre de la pequeña, contó a The Washington Post, que ella buscó contagiar a su hija su amor por la lectura, pero nunca se imaginó que su hija Daliyah Arana se convertiría en una auténtica “devoradora” de libros.

“Cuando estaba embarazada, leía cuentos a otros niños para transmitir la pasión por los libros”, relató Haleema.

También recuerda que, con 18 meses, Daliyah ya reconocía muchas de las palabras que aparecían en los cuentos que le leían en casa.

Como si de una adicción se tratase, la niña lectora empezó a devorar todo tipo de textos día tras día. Algo que le ha seguido acompañando hasta que con sólo cuatro años ha completado la lectura de más de mil libros, además de otros cientos de textos. Eso sí, estos últimos no le gustan tanto como las historias infantiles a las que recurre habitualmente.

Y es que, en relatos más adultos se detiene constantemente para que le expliquen el significado de muchas palabras. Pero aun así, Daliyah se empeña en seguir leyéndolos.

“Sus favoritos son los libros de dinosaurios y su autor estrella es Mo Willems”, señala su padre Miguel Arana, un mexicano que llegó a Estados Unidos en 1986.

“A veces leía cuatro o cinco libros infantiles cortos (de cinco a 10 páginas) en una sola visita a la biblioteca. Y algunos los leyó dos o tres veces porque le gustaron mucho. Si se sacan cuentas, es como si hubiese leído 250 libros anuales en sus cuatro años de vida”, cuanta el orgullo papá a Unión Noticias.

Tal ha sido la sorpresa en Estados Unidos, que fue convocada para ser “bibliotecaria por un día” en la imponente Biblioteca del Congreso, frente al Capitolio.

Daliyah quiere, de hecho, ser bibliotecaria cuando sea grande. “Me gusta ir a ver libros todos los días”, le dijo la pequeña Daliyah al diario Gainesville Times. “Y quiero enseñarle a otros chicos a

La niña prodigio de Gainesville, en Georgia, terminó de leer su primer libro cuando tan sólo tenía dos años y 11 meses.

La pequeña Daliyah es oficialmente la lectora más precoz conocida nunca. Su caso ha roto todos los esquemas de los especialistas en la enseñanza de la lectoescritura, quienes ya hablan de ella como un asunto digno de estudio.

AGP