Opinión
El terremoto que se espera
Han pasado 10 días del sismo y la gente sigue hablando por todos lados de él; en el Metro, en el tianguis, en Starbucks, en el Uber, en el transporte, en la peluquería. Que cerca y que lejos recuerdo aquel 1985 como si hubiera sido hace unos meses… pero han pasado tres décadas.
Este temblor, como aquel, también nos sacudió. Ojalá conformé pasen los días y retorne la calma no volvamos a ser los mismos apáticos, los mismos narcisistas, los zombies que no queremos ver más allá de la pantalla de nuestro celular.
El terremoto que viene debe ser social, como en 1985. Las generaciones de mexicanos de entonces salieron a las calles a remover escombros, a rescatar gente, se organizaron para salir adelante. Hoy sucedió lo mismo, jóvenes con la mejor disposición en todos los derrumbes al menos en la CDMX.
El gobierno quedó rebasado ante la emergencia en 1985 y tal parece que también en 2017. Según Carlos Salinas de Gortari, en varias entrevistas que se pueden ver de nuevo en YouTube, reconoce que 1985 fue el detonante que sacó por primera vez al PRI de Los Pinos.
Este 19 de septiembre, cómo aquel otro (1985 y 2017), debe ser el preámbulo de un terremoto social para poner un alto a los partidos del TOMO TODO y USTEDES NADA, a los políticos de la corrupción que permiten funcionarios que sellan permisos de construcción que matan (porque no cumplen las normas) a cambio de una mordida.
Que este temblor ponga un alto a los que planean autopistas como el Paso Exprés que exprés-mente colapsó, o a las obras eternas de supuesta repavimentación en carreteras donde desvían millonarios recursos (como en la Autopista del Sol o la México-Querétaro).
Este sismo debe sacudir fuertemente la conciencia de los mexicanos, de saber que su voto y su voz deben de ser RESPETADOS. Este temblor social que necesitamos, debe impedir a los partidos que están muertos de miedo por el enojo de los ciudadanos, que desvíen la ayuda millonaria hacia la campaña presidencial que será en unos meses o hacia sus bolsillos.
Ojalá este terremoto nos haga hacer conciencia de que es REAL que vivimos en una zona sísmica, que no vamos a saber cuándo llega una sacudida, pero si podemos estar mejor preparados, saber si nuestra casa es segura, con una cultura más avanzada en protección civil, con un plan familiar, con una mejor alerta sísmica.
De verdad deseo que ese terremoto (social) llegué y como el sismo de 1985 que revivimos este 2017, México no vuelva a pasar por los temblores políticos que hemos tenido cada seis años, como en el 2000, 2006, 2012, que eso no se repita en 2018.
Emanuel Mendoza
Twitter: @emanuelmendoza1
Editor de Siete24.mx