México
Padrinos apoyan al acompañamiento familiar y refuerzan los valores de fe: Monseñor Jorge Cuapio
El padrino se convierte en un referente y en un motivo de inspiración para el ahijado que lo debe acercar al ideal cristiano.
Ciudad de México.- Monseñor Jorge Cuapio Bautista obispo de Iztapalapa encargado de la comisión de niños y jóvenes de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), señaló que los padrinos son un pilar en el acompañamiento de fe y de los valores con los ahijados.
Expresó que en el derecho canónico se distingue entre el padrino de un adulto y el de un menor, el sentido del adulto es garante de la persona que se ha convertido a través del sacramento del bautismo.
El padrino es el que garantiza que la persona obra de buena fe.
Mientras que el padrino de un menor ahí quien garantiza la fe y la formación de ese niño que son los padres en matrimonio es decir un hombre y una mujer, para que los padrinos acompañen y apoyen en los valores a ese niño.
“Es una persona capaz de asumir responsabilidades libremente y que sea una persona de fe probada, virtuosa y practicante de la fe que profesa”, externó monseñor Jorge Cuapio.
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El también Obispo de Iztapalapa encargado de la Comisión de Niños y Jóvenes de la Conferencia del Episcopado Mexicano, señaló que el padrino se convierte en un referente y en un motivo de inspiración para el ahijado que lo debe acercar al ideal cristiano.
“la Iglesia insiste mucho en el testimonio, el padrino es un referente y acompañante en este camino de fe que lo va acercando al ideal de cristiano que debe vivir, por eso debe ser una persona que lo manifieste hoy estamos en tiempo de Pascua y es reflejar la luz de Cristo”, Aseveró.
Dijo que el padrino es quien ilumina y el cristianismo no es una forma de pensamiento, ser cristiano es un estilo de vida, de pensar de actuar, de servir porque el modelo es Cristo.
El padrino debe ayudar con sus consejos para que el ahijado no caiga en modelos o modas que pueden dañar su fe o su persona.
“Más que iluminar con ideas, es ser de Cristo porque somos imagen de Cristo y hay que vivir como Cristo; con el testimonio del padrino y su palabra ayuda al ahijado a comprender la diferencia entre la moda, ideología y la identidad que se debe tener como hijos de Dios”, reiteró Monseñor Cuapio Bautista.
ARH