Consumir comida chatarra puede generar depresión

Ciudad de México.- Según la OMS, la depresión es un trastorno mental frecuente, que se caracteriza por la presencia de tristeza, pérdida de interés o placer, sentimientos de culpa o falta de autoestima, trastornos del sueño o del apetito, sensación de cansancio y falta de concentración.

De acuerdo con especialistas comentaron que el riesgo para que una persona obesa padezca de depresión, es del 55% más que en otros y en mucho es por la alimentación que lleva.

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Así lo señalo el psicoterapeuta, Alberto Ramales quien explicó que la salud debe empezar por una mente tranquila y de calidad que evita la depresión.

“Varios de los episodios depresivos que tienen la mayoría de las personas se debe a su sobrepeso, no se sienten conformes con el volumen de su cuerpo, así que esto los agobia y los conduce a comer mucha más comida con un alto contenido de azúcares simples y carbohidratos”, agregó el especialista.

Alberto Ramales también expresó que el buen hábito del sueño es fundamental para el cuerpo, e intentar cambios de malas prácticas alimentarias y también no caer en los fetiches como los cuerpos de personas que aparecen en las redes sociales.

“la apariencia en las redes sociales no es la correcta, porque eso nos aparta de la realidad porque eso que vemos ahí, eso no es la realidad; es sumamente costoso sólo podemos estar bien si nuestro cuerpo está sano y nuestra mente está tranquila.

Por su parte Miriam Ceballos nutrióloga y Healt Coach, quien dijo que en las generaciones anteriores, la alimentación era más sencilla pero era mucho más sana.

Donde empezó a cambiar el hábito alimenticio fue cuando la gente empezó a consumir alimentos rápidos, industriales y ahí es donde empezó la obesidad a hacerse presente en la mayoría de las personas y con ello algunas enfermedades.

“El cambio de alimentación y con ello llegaron algunos problemas en la salud, como hipertensión, diabetes e infartos”, expresó Miriam Ceballos.

También la nutrióloga aseveró que se deben retomar las costumbres de comer lo más sano posible, pues se ha perdido la cultura de la buena nutrición y por ello se ha extendido la obesidad a los niños.

“Es importante que desde la casa se les enseñe a los pequeños a comer saludable y variado; además evitar en la medida de lo posible los alimentos industrializados”, advirtió.

También algunos estudios sugieren un papel preventivo de ciertos nutrientes y alimentos, como las vitaminas del grupo B, los ácidos grasos omega-3 y el aceite de oliva. Asimismo, un patrón dietético saludable, como la dieta mediterránea, se ha relacionado con un menor riesgo de depresión”.

Finalmente, El psicológo-terapeuta Diego Ortega aclaró que las grasas pueden tener efectos negativos sobre diferentes sistemas biológicos incrementando, entre otros efectos, el riesgo de enfermedad cardiovascular. También la ingesta de este tipo de grasas se asoció con un mayor riesgo de depresión.

ARH