Mostradores de farmacia: ¿Cómo deben ser?

El mostrador de la farmacia es un punto de encuentro entre el negocio y su consumidor. Es lo primero que perciben los clientes cuando entran al establecimiento. Por ello deben transmitir confianza, seguridad, higiene y proximidad. Por no hablar de que también es un lugar de trabajo, donde los empleados deben sentirse a gusto para hacer su labor correctamente.

¿Cómo deben ser los mostradores de farmacia?

Los mostradores de farmacia tienen que destacar por su comodidad, funcionalidad y estética, proporcionando una experiencia buena y única tanto para el comercio como para los consumidores.

Hoy en día, se considera que una farmacia es más que una empresa. Es un lugar dedicado a la salud y el bienestar de las personas que prestan un servicio insustituible.

Una atención o experiencia de compra a medida para quienes acuden a estos establecimientos conforman una mejor reputación de la marca y sus beneficios en el mercado.

El mostrador, como mueble que entabla el compromiso directo, es fundamental para lograr esta experiencia. Estas piezas de mobiliario no solo ayudan a organizar el espacio de trabajo para sacarle el máximo partido, sino que también permiten acercar el producto al cliente y desarrollar un contacto personal e íntimo con él.

Por todo ello, estos muebles deben reflejar la imagen y los valores de la farmacia como marca. Es fundamental que el consumidor pueda asociar su entorno con el negocio.

La imagen corporativa de una farmacia debe reflejarse y encontrarse en sus mostradores y demás muebles. En términos de estilo y acabado, deben complementar la línea de diseño de la farmacia.

Además y muy importante, no se debe descuidar la funcionalidad necesaria para desarrollar el negocio de forma cómoda y agradable.

Los muebles de la farmacia deben ser estéticos, pero también funcionales y prácticos. No se trata solo de puestos individuales para la atención al cliente, sino de un espacio de almacenamiento ordenado y adecuado.

En este sentido, tienen que estar fabricados a medida para aprovechar siempre y al máximo todo el espacio disponible.

La estética, la moda y los estilos vanguardistas ayudan a construir una experiencia única y personalizada de atención a los clientes. Es por esto que se recomienda buscar empresas especializadas en la fabricación de este tipo de mobiliario.

Tan especial como el servicio delicado y personal que brindan las farmacias deben ser sus muebles. Se recomiendan materiales de alta calidad y durabilidad como ciertos tipos de madera lacada o el Krion. Estos son los ideales para una compañía farmacéutica.

No hay restricciones en el diseño de un mostrador; puede ser lo que el dueño de la farmacia disponga. Las empresas que hacen estos muebles dan mucha importancia y se adaptan a las necesidades de sus clientes.

Como fabricantes, pueden ofrecer la construcción desde cero o la reforma de cualquier farmacia sin importar su tamaño.

Todo ello en función de que están capacitados para construir cualquier estilo y tamaño de mostrador de forma única y a medida, garantizando la mayor calidad en su acabado y en los distintos materiales utilizados.

¿Qué elementos deben tener los mostradores de farmacia?

• Mostradores personalizados: no es igual una enorme farmacia que venda además, artículos de parafarmacia y productos alimenticios que una pequeña farmacia solo de medicamentos.
• Suelo: aunque no forme parte del mobiliario, el suelo de una farmacia es importante. Debe ser higiénico, antideslizante, fácil de mantener y resistente al tráfico de personas.
• Mostradores utilitarios: no solo deben ser estéticos, sino prácticos para guardar artículos de todo tipo. Se incluye aquí el material de oficina y contabilidad del negocio.
• Iluminación: las farmacias venden medicinas, productos ortopédicos, kits de cirugía y artículos de higiene personal. Debe ser, por tanto, un espacio limpio y bien iluminado. Que permita leer las etiquetas de lo que se vende.
• Espacio para asesorar al cliente: esto es indispensable para brindar un buen servicio a los usuarios.
• Materiales de calidad: el mobiliario de la farmacia debe ser duradero, lavable y fuerte para aguantar el paso de los años y el uso diario. Se recomienda algunos tipos de maderas, así como otros materiales resistentes y de colores claros como los tonos en blanco que reflejan la luz.

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