Con ello, los ciudadanos pueden tomar decisiones informadas para el próximo 2 de junio, sin presiones ni amenazas.
La misericordia divina y la intercesión de la Virgen María para que otorgue paz y resignación a todos los afectados.
Subrayó el compromiso de la iglesia católica de acompañar a estos grupos tanto en la oración como en el contacto con las autoridades.
La CEM busca llamar a la reflexión y a la acción, recordando que la paz y la justicia son responsabilidad de todos los mexicanos.
Esta agenda propone un cambio esencial en la conciencia colectiva, alejándonos de una cultura de violencia para abrazar una cultura de paz.