Italia, en caída libre

Ciudad de México.- El 9 de julio de 2006 en el estadio Olímpico de Berlín la Selección de Futbol de Italia conquistó su cuarta Copa del Mundo al vencer en penales a Francia, 11 años después quedó fuera de Rusia 2018, algo que comenzó a gestarse desde hace siete años en Sudáfrica 2010.

De la misma forma en que España 82, el cuadro “azzurro” creció en la justa mundialista de Alemania 2006, de la mano de gente como Alessandro del Piero, Francesco Totti, Andrea Pirlo, Genaro Gatusso, Fabio Cannavaro, Gianluigi Buffon, entre otros tantos, todos bajo el mando de Marcelo Lippi.

Tras dejar en el camino a Australia, Ucrania y a Alemania a partir de los octavos de final, llegaron a la final para derrotar desde los “once pasos” al cuadro galo, y así regresar al olímpo del futbol mundial.

Esa generación fue la última que le dio una gran alegría al “calcio”, ya que cuatro años después buscó refrendar su título con al menos nueve campeones del mundo, pero sin el mismo nivel, además que ya no contaban con jugadores del calibre de Del Piero o Totti.

El resultado fue desastroso, ya que Italia quedó eliminada en la primera ronda al empatar con Paraguay y Nueva Zelanda, además de perder con Eslovaquia.

Este fracaso fue el primer aviso, del cual no aprendió, ya que en Brasil 2014 llegó con muchas expectativas, todavía con algunos “sobrevivientes” del título mundial, pero de igual manera que cuatro años antes, sin un referente ofensivo de gran nivel.

Bajo el mando de Cesare Prandelli, la selección italiana ilusionó a su país al debutar con una victoria sobre Inglaterra, pero se desmoronó de manera dramática al perder inesperadamente con Costa Rica y jugarse la vida frente a Uruguay que la derrotó por la mínima diferencia para quedarse nuevamente en la ronda de grupos.

Italia confirmó esta crisis al quedar fuera de Rusia 2018 al perder con Suecia, una serie de repechaje en la que fue incapaz de marcar gol en 180 minutos, lo que la obliga a regresar a sus bases como grande del futbol mundial.