Columna Invitada
Autocrítica
Por Antonio Maza Pereda
A reserva de la revisión a fondo que se hará de las elecciones del 2024, cuando el INE abra entre un 60 % y 80 % de los paquetes electorales, es importante analizar la reacción de la oposición. Una oposición que, en su primer momento, después del anuncio de los resultados, se quedó pasmada. En estado de negación.
Primero reconocen la pérdida y después, dando marcha atrás, culpan al contrincante y empiezan la acusación de fraude electoral. Lo cual no tendría nada de raro, por cierto. Pero no se ha visto alguna idea de autocrítica. Y esto parece importante. Una autocrítica que debería ser pública, porque es un deber para el votante que creyó en la alianza opositora.
Hay lecciones a evaluar. Primero, el desprestigio que atrajo a sus candidatos, el lastre de los partidos políticos, terriblemente desprestigiados. Además, la falla de su estructura territorial, que al final de cuentas era lo que los partidos podían ofrecer a la oposición, al electorado y sobre todo a los candidatos. Una estructura que se vio ausente; que no alcanzaron a tener ni siquiera representantes para cada casilla. Y muchísimo menos, tuvieron un trabajo de promoción del voto. Uno preguntaría: ¿en dónde estuvo la presencia territorial que se supone que era lo que aportaban a la coalición?
Hay que romper con algunos mitos, como el de pensar que las manifestaciones se traducen en votos. Lo cual tampoco es tan claro. Las manifestaciones multitudinarias de la oposición no se reflejaron en el voto. Otro mito muy extendido es pensar que la presencia en redes sociales va a convertirse en votos. Los “clics”, no dan votos. Aunque muchos lo piensen así.
Y hay más cosas que evaluar. Estos son algunos de los primeros puntos para una revisión a fondo y una autocrítica. Detrás de todo esto, para la ciudadanía, hay una duda importante: ¿necesitamos nuevos partidos políticos?
La opinión emitida en este artículo es responsabilidad del autor y no necesariamente refleja la postura de Siete24.mx