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¿Cómo llegar a Mazamitla?
Mazamitla, un pequeño pueblo del sur de Jalisco, en el que se respira naturaleza, magia y pasión.
México tiene una diversidad de destinos turísticos que varían en muchos aspectos, pero en lo que siempre coinciden, es que son espectaculares. Tal es el caso de Mazamitla, un pequeño pueblo del sur de Jalisco, en el que se respira naturaleza, magia y pasión; y en el que hay los más campestres y cómodos alojamientos que se puedan encontrar.
Para hacer turismo en México hay una infinidad de excelentes opciones para todos los gustos. Hay muchos lugares turísticos de México que no hay que perderse.
Ciudades maravillosas, hermosas playas, centros culturales e históricos; fascinante vida nocturna y demás atractivos que hacen de este país uno de los destinos turísticos más visitados del mundo.
Sitios como Playa del Carmen, Tulum y Acapulco, en la costa caribeña mexicana, Ciudad de México, Guadalajara, Mérida, Akumal, Barrancas del Cobre, Puerto Vallarta, Palenque, San Miguel de Allende y las ruinas mayas, son parte de los lugares que todo turista que esté en el país debe visitar.
Pero una ciudad que, sin duda, siempre marca increíbles recuerdos y que se caracteriza por su tranquilidad y cercanía con la naturaleza, es el pueblo mágico de Mazamitla.
Ubicado al sur de Jalisco, a 122 kilómetros de Guadalajara; que tiene los más maravillosos paisajes que se puedan ver y disfrutar con plenitud alojándose en una hermosa cabaña campestre.
Es un sueño que se puede hacer realidad fácilmente con solo revisar todas las opciones para escoger la cabaña que más guste; hacer las maletas e irse a pasar unos días maravillosos con la naturaleza, alejados del bullicio y las aglomeraciones de las ciudades, lo que sin duda, puede ser una extraordinaria manera de pasarlo muy bien.
Llegar a este pueblo es muy fácil. Si vas en transporte público solo debes tomar un autobús en la central de Guadalajara; y recorrer aproximadamente dos horas y media de carretera, en la que también se puede disfrutar de sus hermosos paisajes. En transporte privado solo hay que tomar la carretera hacia Morelia, y en el pueblo de Tuxcueca, tomar el desvío a Mazamitla; el viaje dura aproximadamente 2 horas.
Ventajas de alquilar una cabaña
Al rentar una de las cabañas de Mazamitla no solo se puede conseguir un lugar cómodo y seguro donde poder pernoctar por las noches y pasar unos confortables días.
Sino que además, se tiene el privilegio de estar en un lugar rodeado de naturaleza, porque todas estas cabañas siempre están ubicadas muy cerca de hermosos parajes naturales.
Además, las cabañas son muy confortables y tienen todas las comodidades del mundo moderno que se necesitan para pasar unos días realmente apacibles sin preocupaciones de ningún tipo.
Sus precios son muy asequibles y con la libertad de estar en un sitio disponible totalmente para su uso, sin las restricciones de las instalaciones hoteleras.
Una importante ventaja de estas cabañas es que se pueden alquilar vía online. Gracias a los extraordinarios servicios que las páginas web especializadas ofrecen a través de internet; a los que se puede acceder de manera práctica, rápida y segura, para elegir la cabaña que se prefiera y hacer la correspondiente reserva.
Mucho que hacer en Mazamitla
Hay muchas cosas que hacer en Mazamitla para pasar unos días de descanso y naturaleza, con la idea de despejar la mente y darle ese necesario relax que siempre hace tanto bien, con una gran variedad de emocionantes actividades para todas las edades, gustos y presupuestos.
Lo primero que se debe hacer es alquilar una cabaña en la zona, ya que hay de distintos modelos, clases y capacidades, para satisfacer cualquier necesidad y preferencia.
Éstas son muy confortables, y cuentan con todos los servicios y comodidades que puede tener una casa, con la diferencia de que se tratan de cabañas ubicadas en medio de la naturaleza.
Una vez alojados en una cabaña, se debe planificar la agenda de actividades que se quieren hacer, entre las que podemos destacar:
- Recorrer el pueblo: es un lugar muy apacible, con una plaza central alrededor de la cual se ubican pintorescas casitas tradicionales; muy coloridas y llenas de atenciones para propios y visitantes. El sitio es propicio para visitar el kiosco de la plaza y sentarse para relajarse tomando un buen café en la zona.
- Adentrarse en los bosques de La Zanja y la Sierra del Tigre: están muy cerca del pueblo y tienen senderos bien elaborados para hacer caminatas y pasear. En la zona siempre hay guías que pueden ayudar a hacer los recorridos para que disfrutes con seguridad de los hermosos paisajes repletos de pinos; robles, ríos y cascadas.
- Conocer el Jardín Encantado: es un precioso lugar ubicado en Los Cazos, en el que puentecitos de ensueño; que parecen sacados de un cuento de hadas, cruzan bellísimos afluentes de agua cristalina que bajan desde la sierra.
- Visitar la iglesia de San Cristóbal: es una muy llamativa obra arquitectónica que tiene unas imponentes torres y unas hermosas vidrieras; que han hecho de este templo católico que data de mediados del siglo XX, un lugar obligatorio de visita para los turistas.
- Práctica de deportes extremos: el ambiente de montaña es propicio para que las empresas y operadoras de turismo ofrezcan emocionantes actividades; como por ejemplo paseos en cuatrimoto, tirolesa, puentes colgantes, muros para escalar, paintball; y, aunque no sea tan extremo, también son emocionantes los recorridos en bicicleta.
- Ir al Festival de Flores: es la feria más tradicional del pueblo, que se celebra los fines de semana de octubre; cuando las calles del pueblo se adornan con distintas variedades de flores de montaña; y se celebran actividades musicales y culturales para disfrute de visitantes y turistas. Es la fecha ideal para pasar unos días en el pueblo.
- Probar el bote y el atole de aguamiel: los platos gastronómicos por excelencia de Mazamitla son el atole de aguamiel; que se prepara con atole blanco y, por supuesto, aguamiel antes de fermentar. El bote es una especie de sopa que se elabora con tres tipos de carnes (res, pollo y cerdo); que se puede combinar con varios tipos de verduras, siendo un caldo muy apreciado en la zona; que nadie debería dejar de probar al estar de visita.