México
“Trata de seres humanos, una cárcel sin rejas”: Obispo de Ciudad Juárez
Ciudad de México.— En el marco de la creciente crisis de movilidad humana, el obispo de Ciudad Juárez y responsable de la Dimensión Episcopal para la Pastoral de la Movilidad Humana de la Conferencia del Episcopado Mexicano, Guadalupe Torres Campos, describió que la trata de seres humanos es una “cárcel sin rejas” donde se violan impunemente todos los derechos humanos.
Representó la trata como una realidad de “cárceles sin rejas”, donde personas, familias y comunidades enteras son vulneradas y sometidas a condiciones de esclavitud por grupos criminales, especialmente en las fronteras.
El obispo Torres Campos subrayó que millones de personas en todo el mundo son sistemáticamente sometidas a diversas formas de violencia relacionadas con la trata de seres humanos. Los datos estadísticos son alarmantes, destacando que las mujeres y las niñas representan el porcentaje más alto entre las víctimas.
“Personas y familias, tanto nacionales como extranjeras, desde el vientre materno y a todas las edades, son captadas por criminales y expuestas a intereses perversos de un sistema capitalista y neoliberal voraz, impregnado de corrupción”, afirmó el prelado.
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Este sistema, añadió, se ve fortalecido por la ineficacia de los marcos legales y las políticas migratorias represivas, que actúan como “enormes piedras de sepulcro” vulnerando la vida y desprotegiendo de todos sus derechos.
El obispo también destacó la situación geográfica de México, que debido a sus índices de pobreza y violencia, se ha convertido en un lugar de tránsito, origen y destino de la trata de personas.
“Es fundamental visibilizar este delito, manifestar nuestra solidaridad con las víctimas, unir esfuerzos en la prevención y comprometernos a lograr una vida libre de trata, justa y digna para todas y todos”, instó Torres Campos.
El prelado hizo un llamado a implementar políticas migratorias basadas en el respeto a los derechos humanos y a demandar programas de desarrollo social y comunitario que promuevan la dignidad y la identidad de todas las personas, sin importar su origen o estatus migratorio.
Asimismo, exigió la penalización y sanción efectiva de todo tipo de violencia, garantizando la reparación del daño.
Torres Campos exhortó a la sociedad a denunciar la barbarie de la trata de personas y a rechazar la impunidad.
“Merecemos una sociedad y un país donde los únicos lazos sean los de la unidad, la confianza, la seguridad, la hospitalidad y la paz”, enfatizó.
ebv