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La maternidad está en crisis, la paternidad también: Dra. María Calvo
Los héroes de hoy son las familias
Ciudad de México.- “El hombre y la mujer están en crisis”, enfatizó de entrada la Dra. María Calvo, especialista investigadora, durante su ponencia “Paternidad y Maternidad en el Siglo XXI”, como parte del programa del Seminario Internacional por Las Familias, que se lleva a cabo en Costa Rica.
La Académica lanzó una alerta sobre la degradación de la maternidad y también de la paternidad actualmente, sobre todo en los países desarrollados, “hay una crisis del ser humano, y por tanto en la familia”.
Esta crisis del hombre y la mujer, que propone un ser humano nuevo, es una aberración disfrazada de libertades, explica, la Presidenta en España de la Fundación Europea Educación y Sociedad:
“Hace parecer atractivo lo que es barbarie. El hombre y la mujer están en crisis y se ha construido un ser humano nuevo, sin naturaleza porque se niega la biología con la teoría de género, se niega la alteridad sexual, por lo tanto la feminidad y masculinidad como algo biológico”.
“Sin Dios todo está permitido”, nos recuerda la investigadora, esta máxima está sucediendo, por ejemplo, gracias al amparo de las leyes.
“Ahora la mujer decide cuando traer vida al mundo, sin amor, sin sexo, sin padre, porque la tecnología se lo permite. Los hijos son productos de consumo emocional, no un resultado del amor de los padres”.
La Dra. María Calvo reflexiona que esta crisis de hombre y mujer nos conducen a una crisis de la paternidad y la maternidad; porque si no sabemos cómo ser hombre y mujer, no sabemos cómo ser padre o madre.
La maternidad en crisis por engaños
La maternidad está sufriendo una desviación sobre todo en los países desarrollados. La primera desviación de la maternidad es el aborto, que se ha extendido tanto como un derecho, cuando en realidad no lo es.
“Se le vende el aborto a la mujer como un derecho cuando es un maltrato, una violación a los derechos de la mujer; es una fractura en la feminidad, porque las mujeres estamos diseñadas para traer vida al mundo, no muerte”.
Otras desviaciones son por ejemplo, la negación de la maternidad: las mujeres que no quieren ser madres porque los hijos quitan tiempo y quitan libertad; sí, pero “los hijos son la expresión más sublime del amor”.
La maternidad solitaria, sin padre; es otra desviación que en realidad “es una perversión”, denuncia la colaboradora de los diarios El País y El Mundo; es condenar a los hijos a ser huérfanos antes de nacer, sin raíces, lo que genera mucha incertidumbre de su existencia a estos niños, que se preguntarán más adelante ¿quién soy yo?
La ausencia e invisibilidad del padre
Actualmente se le exige al padre que sea madre también, entonces la masculinidad está desubicada, se consideran tóxicos los atributos de protección, como la fortaleza, el proveer a la familia, esto es frustrante para los hombres, los hace prescindibles, los desplaza.
La figura paterna es más necesaria que nunca actualmente, destaca María Calvo, porque ante su ausencia, la maternidad se convierte en dominación sobre los hijos, o la madre se convierte en la pareja del hijo, y esto es inadecuado.
“El padre y la madre son necesarios porque debe seguir la diferencia sexual porque hombres y mujeres tenemos distintas características, porque la pareja, el matrimonio, es la roca sobre la cual descansan las raíces y las alas de los hijos”.
Y sentencia:
“La felicidad de los hijos se gesta en el lecho matrimonial, de forma simbólica, si los padres son felices, los hijos también”.
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