Ciudad de México.- En un emotivo encuentro con estudiantes de varias universidades católicas, celebrado en la Universidad Pontificia de la Ciudad de Mexico, el Cardenal José Tolentino de Mendonça, prefecto del Dicasterio para la Cultura y la Educación de la Santa Sede, ofreció una diálogo en la que subrayó el rol esencial que los jóvenes tienen dentro del ámbito universitario.

Durante su intervención, resaltó que los estudiantes son “el corazón de las universidades” y que las aulas de clase representan más que simples espacios de aprendizaje, describiéndolas como áreas de “pacto” entre la inteligencia individual y la colectiva.

Las aulas son lugares de sueños

El cardenal, enfatizó que el aula de clase es un lugar donde nacen sueños, interrogantes y momentos compartidos, tanto de alegría como de desafío.

“Cuántos recursos, cuántas estaciones, cuántos problemas y cuántas preguntas surgen en una sala de clase”, expresó, resaltando la importancia de la relación entre profesor y alumno en la búsqueda común de la verdad.

Comparó las aulas con salones de pacto señalando que en ellas se produce un proceso de transformación y nacimiento de ideas tanto para los profesores como para los estudiantes.

“Es un pacto para todos, porque juntos buscamos, interrogamos y escuchamos con el corazón y con nuestra inteligencia”.

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Siempre hay herramientas de esperanza

Además, destacó el valor de la inteligencia colectiva como una “herramienta de esperanza”, recalcando la importancia de pensar de manera comunitaria y ser una verdadera comunidad.

“Saber pensar por sí mismos, pero también al lado de los otros, es ser comunidad”, dijo el cardenal.

El Cardenal Tolentino también instó a los estudiantes a apasionarse por sus estudios y a no conformarse con respuestas superficiales.

Los animó a buscar soluciones no solo a las preguntas inmediatas, sino también a las grandes interrogantes de la vida, aquellas relacionadas con el sentido y la eternidad.

Asimismo, señaló que una universidad no es lugar para pesimismos, sino para la fraternidad, la colaboración y el optimismo.

Citando al Papa Francisco, invitó a los jóvenes a ser protagonistas en la vida académica, haciendo oír su voz y sus sueños. “No sean solo asistentes de un espectáculo que pasa”, remarcó, instándolos a tomar un rol activo en la construcción de un nuevo tiempo.

Para concluir, el cardenal recomendó la importancia de la literatura en la formación académica, mencionando el valor de la lectura silenciosa como un acto que enriquece la vida espiritual y cultural.

“La literatura ofrece mundos nuevos, profundidad, y permite una escucha que, en última instancia, es la voz de Dios”, concluyó.

Este encuentro con el Cardenal Tolentino fue un recordatorio poderoso del compromiso de las universidades católicas con la formación integral de sus estudiantes, donde se conjugan no solo el conocimiento académico, sino también los valores espirituales y comunitarios.

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Ciudad de México.- Los primeros bailarines Elisa Carrillo, Anaís Bueno, Katia Carranza, Enrique Bejarano, entre otros destacados artistas mexicanos que bailan en compañías internacionales, se reunieron con integrantes de la Compañía Nacional de Danza (CND), para mostrar su arte en el marco de la celebración por los 90 años del Palacio de Bellas Artes.

De esta manera, destacados intérpretes de la danza se reunieron por primera vez en el escenario más importante del país, bailarinas y bailarines como: Anaís Bueno, bailarina del Joffrey Ballet; Katia Carranza, primera bailarina del Miami City Ballet; Elisa Carrillo, primera bailarina internacional; Selene Guerrero, segunda solista del Ballet Nacional de Canadá. Además de Braulio Álvarez, ex solista en The Tokyo Ballet; Enrique Bejarano, bailarín del Birmingham Royal Ballet, y José Pablo Castro Cuevas, bailarín del Joffrey Ballet.

Todos ellos alternaron con integrantes de la Compañía Nacional de Danza: Valeria Mariaud, Mayuko Nihei, Yoalli Sousa, primeras bailarinas; Argenis Montalvo, Alejandro Hidalgo, primeros bailarines; y Alejandro Mendoza, primer solista.

La gala de danza incluyó nueve piezas: Pas de deux del II Acto de Giselle,  interpretada por Katia Carranza y Argenis Montalvo; Planimetría del movimiento, de Irina Marcano, interpretada por Ana Elisa Mena y Alejandro Hidalgo, que usa la música y dibuja líneas, puntos y círculos sobre distintos planos del escenario.  Pas de deux, de Diana y Acteón, a cargo de Valeria Mariaud y Enrique Bejarano.

Además de Loto, coreografía de Raúl Fernández, interpretada por Yoalli Sousa y Juan Capellán, la cual habla del renacer, así como de la flor de loto asociada con el renacimiento y símbolo de fuerza y resiliencia; Cuando regrese, de Braulio Álvarez, llevada a escena por Mayuko Nihei y el propio Braulio Álvarez, coreografía que aborda el reencuentro; Pas de deux de Italy, de Anna Karenina, a cargo de Anaís Bueno y José Pablo Castro Cuevas. Aguas primaverales, interpretada por Selene Guerrero y Alejandro Mendoza, coreografía de Asaf Messerei y la música de Sergei Rajmáninov.

Elisa Carrillo bailó Tué, reada por Marco Goecke en homenaje a la princesa Carolina de Mónaco por sus años de compromiso con la danza; el cierre de la gala fue el estreno de Ciudad Delirio, coreografía de Sonia Jiménez, música original de Marcela Rodríguez y la participación de la Orquesta del Teatro de Bellas Artes (OTBA), bajo la dirección de Julia Cruz. 

La CND también ofrecerá la gala de danza Celebrando el 90 aniversario del Palacio de Bellas Artes el martes 3 y jueves 5 a las 20:00 h y el domingo 8 de septiembre a las 17:00 con el siguiente programa*: Giselle: Adaggio del Acto II, intérpretes: Mayuko Nihei y Argenis Montalvo; Planimetría del movimiento, intérpretes: Ana Elisa Mena y Alejandro Hidalgo; La Esmeralda. Pax de deux de Diana y Acteón, con Valeria Mariaud y Alejandro Mendoza; Loto, intérpretes: Yoalli Sousa y Juan Capellán; Lago de los cisnes. Pas de deux de Cisne blanco, intérpretes: Greta Elizondo y Roberto Rodríguez; All long dem day, interpretada por todos los bailarines, y Ciudad Delirio (estreno mundial), en la que participarán Roberto Rodríguez, Michelle Cutri y el cuerpo de baile.

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Ciudad de México.- El himno “Un Museo Celestial”, dedicado al Museo de la Basílica de Guadalupe, próximamente se presentará en la Catedral de Los Ángeles, California. Este himno, que es un símbolo de devoción y unidad para los mexicanos, ahora traspasará fronteras, llevando su mensaje a la comunidad mexicoamericana en Estados Unidos. La misión de este homenaje a la Virgen de Guadalupe es consolidar un lazo cultural y espiritual que se mantiene vivo pese a la distancia.

Gilberto Ruiz, el compositor del himno, compartió con Siete24 que la inspiración para esta obra surgió de su propio camino de vida, uno marcado por la lucha y la fe. Expresó con profunda emoción lo que “Un museo celestial” representa para él y para la comunidad de creyentes.

“Este himno es un puente que conecta corazones, no importa dónde estén. Es un honor ver cómo nuestra fe y devoción hacia la Virgen de Guadalupe pueden resonar tan lejos de nuestra tierra, en un lugar tan emblemático como la Catedral de Los Ángeles”.

gilberto ruiz

El tenor Fernando Cravioto, cuya interpretación del himno ha sido aclamada por su solemnidad y emotividad, subrayó la responsabilidad que sintió al darle voz a una obra tan significativa. “Cantar ‘Un Museo Celestial’ no es solo interpretar una melodía; es llevar en cada nota el fervor de millones de personas que encuentran en la Virgen de Guadalupe un refugio, una guía. Es un privilegio y una responsabilidad que tomo con todo el respeto y devoción que se merece”, afirmó, visiblemente conmovido por la trascendencia de su participación en este proyecto.

Monseñor Diego Monroy Ponce, emérito de la Basílica de Guadalupe, participó en una conferencia de prensa para presentar el proyecto, y destacó la importancia de que este himno esté disponible para todos los fieles, no solo en México, sino ahora también en Estados Unidos. “La Virgen de Guadalupe es un símbolo de unidad y esperanza para nuestra gente, especialmente para aquellos que han dejado su hogar en busca de un futuro mejor. Que este himno se instale en la Catedral de Los Ángeles es un recordatorio de que, sin importar dónde nos encontremos, la fe nos une y nos sostiene”, dijo, enfatizando el valor espiritual que esta obra tiene para la comunidad migrante.

La proyección del videoclip oficial de “Un Museo Celestial” en la Catedral de Los Ángeles marcará un hito en la difusión de la devoción guadalupana fuera de México. “No es solo un video, es una invitación a vivir y reflexionar sobre la grandeza de nuestra fe, a través de una experiencia audiovisual que captura la esencia de lo que significa ser guadalupano”, destacó Ruiz, quien también mencionó la calidad artística y técnica del proyecto, con arreglos a cargo del maestro Javier Carrillo y la producción de Ismael Hernández, ambos reconocidos por su talento y compromiso con la música mexicana.

El contexto histórico detrás de este acontecimiento está vinculado al 80 aniversario del Museo de la Basílica de Guadalupe, para el cual fue concebido el himno. “Es un regalo para todos aquellos que llevan a la Virgen en el corazón, y ahora, más que nunca, necesitamos recordar que ella siempre está con nosotros, no importa la distancia”, comentó Ruiz, recordando cómo la fe en la Virgen ha sido un pilar fundamental en su vida, desde su infancia en Michoacán hasta su vida en Estados Unidos.

Monseñor Monroy cerró la conferencia con una reflexión sobre el papel de la Virgen de Guadalupe como madre espiritual de todos los mexicanos, y cómo este himno es un reflejo de su amor incondicional.

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Ciudad de México.- Este 28 de agosto se celebra el Día Internacional de los Abuelos. Repasar la vida de nuestros mayores representa un viaje que transporta a aquel disfrute infantil de escuchar voces entrañables relatando vivencias, pero también es una oportunidad de atender de distinta forma la realidad y descubrir nuestros orígenes.

Te proponemos una selección literaria de títulos con pasajes históricos y narrativas entrañables que colocan a los abuelos como protagonistas.

La Ciudad que ya no existe (Planeta), de Carlos Villasana.

Es un viaje histórico que recorre, a través de 100 fotografías inéditas seleccionadas por el autor, avenidas, edificios, personajes cotidianos y momentos emblemáticos de la Ciudad de México.

“Mi tarea en este libro fue explorar miles de imágenes hasta reunir esos sentimientos que nos hacen recordar y disfrutar no solo la Ciudad de México: también a nuestros familiares y amigos. El cariño profundo que tengo por la ciudad y el respeto que les tengo a todos los creadores anónimos de estas maravillas impresas quedaron plasmados aquí”, comenta el autor.

Sor Juana en la cocina (Planeta), de Mónica Lavín y Ana Benítez

¿Cómo eran los sabores del Virreinato? ¿Qué recetas se seguían en el convento de San Jerónimo? ¿Cuáles platillos preparaba sor Juana Inés de la Cruz? A través de treinta y ocho recetas originales de la cocina conventual de la Nueva España, la escritora Mónica Lavín y la historiadora Ana Benítez se adentraron en el sorprendente universo de la gastronomía del siglo XVII para traer a la actualidad un mundo de gustos y aromas casi olvidados.

El Club del crimen de los jueves (Espasa), de Richard Osman

Relata la historia al interior de Coopers Chase, una comunidad de jubilados al sur de Londres, en la que la convivencia diaria se convierte en un juego de riesgo y una carrera contra el tiempo en el que cada día es una victoria para sus integrantes y que, sin embargo, demuestran ser brillantes y extraordinarios por su amplio conocimiento de las motivaciones humanas. El libro fue considerado como “el fenómeno del año” en 2021, número 1 indiscutible en el mundo: la novela policiaca más ingeniosa y disparatada.

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El país de las calles sin nombre (Seix Barral), de José Adiak Montoya

Narra la historia de Alice Miller, una mujer sumergida en momentos de profundo dolor. La protagonista de esta historia regresa después de varias décadas de vivir exilada en Miami, a Los Almendros, el pueblo que tuvo que abandonar siendo una niña, consecuencia de una atroz guerra; esto ocurre tras un acto de protección por parte de su abuela por salvar su vida y también la de su madre.

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