Connect with us

Columna Invitada

4 de junio de 2023

Publicada

on

Por Antonio Maza Pereda

Estas elecciones para elegir gobernadora en el Estado de México y gobernador de Coahuila han sido mostradas, entendiblemente, con una cierta exageración. Se nos han presentado como la última oportunidad de parar a la 4T, o desde el otro bando, como el ensayo general para triunfar en el año 2024.

Unas campañas dónde se jugó con el miedo: el miedo a la 4T como destructor del país o, por otro lado, el temor a un regreso al pasado que, para muchos, no tiene nada de agradable. Hubo una campaña con pocas propuestas, dónde se jugó a las simpatías o las antipatías de los candidatos. Cabría cuestionar si verdaderamente los resultados, sobre todo los del Estado de México, son un predictor de lo que ocurrirá en las próximas elecciones federales. La realidad es que no ha sido así. Las elecciones del 1999, 2005, y 2017 fueron ganadas por el PRI y sin embargo en las elecciones federales ganaron el PAN y MORENA. Sólo en las elecciones estatales del 2011, que ganó el PRI, este partido ganó también la presidencia en el año 2012. Pero decía que es entendible: no hay mejor manera de impulsar al núcleo duro de cada partido qué decirles o que esta es la última oportunidad o qué sí se gana en ésta, se ganarán la mayor parte de los puestos en el año 2024.

Lo que verdaderamente está en juego es la participación ciudadana. Todos han hecho el esfuerzo por tener una participación mayor de la normal en estos eventos. Todos dicen, y con razón, que una participación copiosa y razonada puede cambiar radicalmente los resultados en el año siguiente. Posiblemente uno de los aspectos más importantes es ver si se logra mejorar sustancialmente la participación de los jóvenes, qué tradicionalmente han sido los que menor intervención tienen en las elecciones. Lo cual no quiere decir que se garantice el triunfo de alguno de los partidos. Habría que ver en qué sentido se da el voto de los jóvenes: no es forzoso que un mayor voto juvenil va a ser en beneficio de la oposición, como muchos dicen.

Para este lunes en la mañana ya tenemos los números del programa de resultados preliminares, de los institutos electorales de cada una de las dos entidades. En ambos casos la participación fue por debajo de lo que esperaba la oposición, que quería tener una participación de los votantes superior al 60%. Y, en la realidad, escasamente se llegó al 51% en Coahuila y 49% en el Edomex.

Gana la 4T en el Estado de México de una manera holgada pero no abrumadora: un porcentaje similar al que obtuvo Andrés Manuel en las elecciones del 2018. Delfina gana con 52.7%, Alejandra llega a 44.3% y el resto son votos nulos o por otros candidatos. Ya al principio de la noche, el PRI, el gobernador y la propia candidata habían reconocido la victoria de la 4T.

En cambio, en Coahuila triunfa de manera holgada el PRI y sus aliados con 56.8%. MORENA y sus aliados tradicionales alcanzan sólo el 35.7% del voto y el candidato del Partido Verde, qué se niega a bajarse de la contienda, obtiene el 5% del voto. Las diferencias al 100%, son los votos por otros candidatos y los votos nulos.

Estos son los resultados preliminares a las 7:15 de la mañana el 5 de junio. Hace falta por supuesto tener la declaración final con el conteo completo de los votos y un estudio detallado de quién votó por edad, sexo, nivel socioeconómico, nivel educativo y otros indicadores.

Hay lecciones para ambos bandos. Otra cosa es que aprendan de la experiencia y aprovechen ese conocimiento. Para MORENA es claro que necesitan tener mayor cuidado con las alianzas. Esto les costó en Coahuila, pero no de modo determinante. En el Estado de México la unidad con sus aliados les permitió tener mejores resultados.

Para la oposición, en mi opinión, la lección debería de ser que no se pueden confiar en los argumentos basados en el ataque ni en el uso de las redes sociales. Las cuales son muy útiles cuando hay un mensaje poderoso, que no fue el caso. Falló la confianza en la mercadotecnia política, que no fue particularmente brillante.

Ejemplo: el eslogan de “VotAle”, con el juego de palabras con el apodo de Alejandra, su candidata, con el llamado a votar, no tenía mayor sustancia. La estructura territorial, que tradicionalmente ha sido la ventaja competitiva del PRI, no fue efectiva como lo fue en Coahuila. Tal vez porque una parte importante de los operadores priistas se pasaron al bando de la 4T. Para lo cual no hay reportes ni estadística.

Es claro que el número de conectados a sus mensajes en las redes sociales y los llamados a hacer virales los ataques contra la candidata de la 4T, no se tradujeron en votos. No hay datos todavía, pero parecería que la mayor parte de los votantes no fueron influidos por las redes sociales: los adultos mayores, los obreros y campesinos, los pobres y las clases medias bajas no son influidos por las redes. Hay que cambiar el método de popularizar y hacer uso intensivo de la tecnología para darle mayor peso a las propuestas que resuenen con el electorado. Y, por supuesto, reconstruir la estructura territorial.

¿Es acaso el fin del mundo, cómo nos decían algunos de los mensajes mediáticos? ¿Ya no hay nada que hacer para la oposición, ni nada que mejorar para la 4T? Lo dudo. Solo el futuro lo dirá. Pero es claro que es un momento de reflexión, de aprender las lecciones que esta elección nos deja. Sobre todo, en el caso de la oposición, el planteamiento a fondo de sus métodos. No que MORENA no pudiera requerir algo parecido, pero cuando se triunfa, generalmente, se estará poco inclinado a cambiar.

Y para nosotros, los ciudadanos de a pie, la lección es que tenemos que encontrar más maneras de participación ciudadana y acostumbrarnos a analizar de fondo lo que nos proponen las fuerzas contendientes, aprender a evitar la gran influencia de la mercadotecnia política, debatir y difundir nuestras ideas con amabilidad.

La opinión emitida en este artículo es responsabilidad del autor y no necesariamente refleja la postura de Siete24.mx

Dejanos un comentario:

Columna Invitada

Sonora frente a los aranceles: ¿riesgo de crisis u oportunidad para ser resilientes?

Publicada

on

La gestión del riesgo, desde un enfoque de resiliencia, implica atender las señales, conocer nuestra situación, evaluar nuestras capacidades y desarrollar un plan de contingencia. Esto debe complementarse con estrategias de atención a emergencias y preparación para la continuidad de operaciones. Pero este principio no solo aplica a los fenómenos naturales, sino a cualquier ámbito, incluida la economía global. No podemos evitar la lluvia, pero sí decidir cómo protegernos, y siempre hay opciones para hacerlo.

El anuncio de aranceles del 25% por parte de Estados Unidos a productos mexicanos ha generado incertidumbre en Sonora, un estado que exportó poco más de $25 mil millones de dólares en 2024, principalmente en manufactura, agroindustria y minería, pero que sólo representa el 5 % de las exportaciones nacionales en comparación, el más bajo de los estados fronterizos, Chihuahua (13.2%), Coahuila (12.3%), Nuevo León (10.5%), Baja California (10.2 %) y Tamaulipas (6.4%)

Pero ¿y si esta presión comercial, en lugar de paralizarnos, se convierte en el catalizador para modernizar nuestra economía? La respuesta no está en el lamento, sino en identificar dónde están las brechas que debemos cerrar y las ventajas que aún no explotamos.

La manufactura: ¿Podemos ser más que “máquila barata”?

Los aranceles golpean fuerte a sectores como el automotriz, que representa el 38% de las exportaciones sonorenses. Empresas como Ford o GM ya evalúan ajustar sus cadenas de suministro. Pero aquí hay una oportunidad:

  • Fabricar componentes de alto valor: En lugar de solo ensamblar, ¿por qué no producir partes críticas para vehículos eléctricos (baterías, motores) o tecnología aeroespacial? Estados Unidos sigue necesitando estos insumos, y Sonora tiene la ventaja geográfica.
  • Invertir en automatización: Reducir costos con robots o IA para competir con Asia. El ITSON y el CIAD podrían ser aliados clave en capacitación.

¿Qué nos falta para dar ese salto tecnológico? ¿Infraestructura, educación o voluntad política?

Agroindustria: De vender materia prima a exportar valor agregado.

Sonora es líder en uvas, espárragos y carne, pero el 70% se exporta sin procesar. Los aranceles encarecen estos productos, pero:

  • ¿Y si vendemos alimentos deshidratados, enlatados o con marcas propias? Un ejemplo: Japón paga hasta 300% más por fruta orgánica empaquetada listo para consumo.
  • Certificaciones internacionales: Solo el 5% de nuestros campos agrícolas tienen sellos como Global G.A.P. o Fair Trade. Estas etiquetas permiten acceder a mercados premium y reducir la dependencia de EUA.

Mientras Sonora y Sinaloa exportan tomate fresco, California vende salsas gourmet hechas con ese mismo tomate a precios 10 veces mayores.

Energía Limpia: El megaproyecto que puede cambiar las reglas.

El Corredor Solar de Sonora, con un potencial para generar 5,000 MW, no es solo un plan ecológico: es una ventaja competitiva. Imagine atraer:

  • Data centers o fábricas intensivas en energía: Empresas como Google o Tesla buscan operar con electricidad 100% renovable. Sonora podría ofrecerla más barata que Texas.
  • Hidrógeno verde: Producirlo aquí y exportarlo a California, que quiere sustituir combustibles fósiles.

Necesitamos conexiones eléctricas modernas y almacenamiento. ¿Prioridad para el próximo gobierno estatal?

Mercados alternativos: ¿Hemos mirado hacia el Pacífico?

México tiene 13 tratados comerciales, pero Sonora sigue enfocada en EUA. Ejemplos de potencial desaprovechado:

  • Asia: Corea del Sur importa el 90% de su carne de res. Nuestros ganaderos podrían cubrir parte de esa demanda si superamos barreras sanitarias.

¿Nuestra mentalidad comercial es demasiado cómoda?

La urgencia de unir fuerzas: Empresas, gobierno y academia.

Ningún sector resolverá esto solo. Casos de éxito parcial:

  • Clúster Automotriz de Sonora: Logró atraer inversiones, pero hoy debe evolucionar hacia la electromovilidad.
  • Iniciativas locales: La vinícola de Caborca exporta a China, pero son excepciones, no la norma.

Es necesario crear un fondo estatal de innovación con aportaciones tripartitas (gobierno, empresas, universidades) para financiar proyectos que reduzcan la dependencia de EUA.

¿Seremos víctimas o protagonistas?

Los aranceles no son el fin, sino un recordatorio de que la economía global exige reinvención constante. Sonora tiene ventajas únicas: recursos naturales, ubicación estratégica y capital humano. Pero falta:

  • Menos discursos, más alianzas.
  • Menos conformismo, más resiliencia audaz.

La pregunta no es si podemos hacerlo, sino ¿cuánto tiempo perderemos antes de actuar? La próxima década definirá si somos un estado que reacciona… o uno que lidera.

¿Invertiremos en modernizar nuestros negocios o seguiremos esperando a que “el gobierno arregle las cosas”?

ARH

Seguir leyendo

Columna Invitada

Un mundo tripolar

Publicada

on

Recientemente, se está hablando de un cambio de época. Con la toma de posesión y las primeras decisiones del señor Trump, se piensa en un nuevo modo de mundo tripolar. Uno encabezado por el propio señor Trump, que incluye a Estados Unidos, otro polo encabezado por Putin de Rusia, y un tercero, por el señor Xi Jinping, presidente del Partido Comunista de China.

Un concepto interesante porque, claramente, se están excluyendo áreas muy importantes como, por ejemplo, la Comunidad Económica Europea con todos sus nuevos adherentes, Japón y la India, con una participación relevante en el mercado mundial.

 Todo esto a raíz de las negociaciones para terminar con la guerra en Ucrania, donde se está excluyendo a Europa en las conversaciones y sobre todo al más afectado, el propio Ucrania. Y por el estilo se plantean las ideas de que, entre esos tres polos de la actividad mundial de la economía, se resuelvan la mayoría de los conflictos geopolíticos y lograr a través de ello una especie de paz.

 No es que falten las diferencias entre esas naciones. Mientras que en Estados Unidos se está buscando aislacionismo, China y Rusia están en plan de expansión. Uno es capitalista, los otros buscan una fuerte intervención del Estado en la economía. Tal vez lo único que los une es su populismo.

 Por otro lado, esta no es una nueva idea. En los 80 del siglo XX se hablaba de un concepto muy parecido. Un mundo tripolar donde los polos eran, en primer lugar, los Estados Unidos, después la Comunidad Económica Europea, que en aquella época era bastante menor, y por último Japón, claramente excluyendo áreas importantes.

En los 80, todavía contaba la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas, más los países satélites de Europa Oriental, incluyendo una parte de las colonias soviéticas en Asia. Australia era también significativa, y no se le estaba considerando desde un punto de vista geográfico, sino como parte, de alguna manera, de la Comunidad Económica Europea.

 En los 80, para cada uno de esos tres polos se mencionaban áreas de influencia. Por ejemplo, en Japón se hablaba de que su área de influencia era sobre todo Asia Oriental y una buena parte del Pacífico, sin incluir necesariamente a Australia. Europa, con su área de influencia en el Medio Oriente y África, así como EE. UU., con su área de influencia en Latinoamérica. Con lo cual ya se armaba ese mundo tripolar.

Al final de los 80, principios de los 90, se empieza a hablar de otro concepto. Se habla de la Cuenca del Pacífico, viene la caída de la Unión Soviética, una importante disminución de la influencia de los rusos, y se rompe con ese esquema tripolar.

Al final del día, el concepto de la Cuenca del Pacífico se volvió un área que era influida muy fuertemente por los Estados Unidos, de quien el famoso ensayista Luis Rubio decía que era el factótum del Pacífico, entendiendo por factótum el personaje con una influencia decisiva en ese lugar. Efectivamente, fue lo que ocurrió. Se fortalece China, no por sus propios méritos, sino básicamente gracias a la inversión de los Estados Unidos, el crecimiento de la maquila y sus inversiones en ese país.

En el actual concepto del mundo tripolar se está excluyendo a Japón, quien ni siquiera se menciona, y no se menciona tampoco a la India, que tiene un crecimiento importante. ¿Verdaderamente es creíble que pueda sostenerse un nuevo mundo tripolar? A corto plazo, sin duda alguna. Pero el gran tema es, sobre todo, su sostenimiento a largo plazo.

Y la razón es el invierno demográfico que está ocurriendo en varios de los países que son los que encabezan ese mundo tripolar. Por ejemplo, el caso de China, donde, debido al fenómeno de la obligatoriedad de familias de un solo hijo, se tiene un muy fuerte invierno demográfico, decrecimiento de la población y un envejecimiento importante en una parte considerable de la misma. El crecimiento se ha centrado solamente en algunas zonas llamadas las zonas económicas especiales. Otro ejemplo relevante es el caso de Japón, donde la población está disminuyendo y la proporción de ancianos crece cada vez más.

 En Rusia, un tema del que se habla muy poco, también se tiene un importante invierno demográfico, donde cada vez hay menos niños y aumenta el número de ancianos. La que se supone que era la segunda potencia militar del mundo, ha sido incapaz de derrotar a un país relativamente pequeño como Ucrania, quien ha recibido apoyos de Europa y EE. UU. Rusia ha tenido que estar pidiendo apoyo, incluso a Corea del Norte, para poder tratar de ganar una larga guerra en la que no han podido tener mejores resultados.

Europa cuenta también con un invierno demográfico importante, donde su crecimiento viene básicamente de los inmigrantes, muchos de ellos de origen islámico, que es donde crece, realmente, su población. Estados Unidos, si se quita el crecimiento que aportan los latinos, tiene también un fuerte invierno demográfico, tanto en la población de anglos, como entre los afroamericanos, quienes están reduciendo su población, con una natalidad que es cada vez más pequeña.

Eso significa que a largo plazo esas economías necesitarán, forzosamente, que aceptar la inmigración.  En el mundo de Trump se buscan cerrar las puertas a la inmigración y se da también en Europa como la petición frecuente de los conservadores. Algo que muy calladamente se ha manejado en Japón desde hace muchísimo tiempo, donde es muy difícil que se permita la inmigración de gente que no sean, étnicamente, japonesa.

Por otro lado, hay países donde existe un auténtico verano demográfico. Es el caso de la India, sobre todo, también en África y, en alguna medida, en Latinoamérica. Esto nos trae un problema muy fundamental. Este concepto de un mundo tripolar es factible a corto plazo, tal vez con una duración como la que pueda tener el señor Trump en el gobierno de los Estados Unidos. Hablamos tal vez de 5 años o máximo una década, pero es algo que es insostenible mientras se mantenga la idea contra la inmigración.

 Estamos necesitando de soluciones de largo plazo, para que en las zonas donde todavía hay crecimiento demográfico mejore la economía y dejen de ser dependientes de los grandes países, de los nodos del supuesto mundo tripolar. Se necesita una manera de hacer crecer las áreas de gran crecimiento como la India, África y Latinoamérica. Hay que pensar en un mundo multipolar, o tal vez, en un mundo no polar, donde todos los países puedan tener un reparto adecuado de los beneficios de la modernidad, y de la globalización. Los grandes países deben dejar de pensar en repartirse el mundo, que es el concepto que estamos viendo con su idea actual de tripolaridad.

La opinión emitida en este artículo es responsabilidad del autor y no necesariamente refleja la postura de Siete24.mx

Seguir leyendo

Columna Invitada

Rubén Ramírez Lezcano se reúne con empresarios mexicanos en su camino a la OEA

Publicada

on

En su carrera por la Secretaría General de la Organización de los Estados Americanos (OEA), el economista y diplomático paraguayo Rubén Ramírez Lezcano sostuvo un encuentro clave con líderes del empresariado mexicano. La reunión congregó a importantes figuras del sector privado con el objetivo de explorar oportunidades de colaboración en el desarrollo económico regional y fortalecer la integración entre los países miembros de la OEA.

¿Quién es Rubén Ramírez Lezcano?

Ramírez Lezcano cuenta con una sólida trayectoria en la formulación de políticas públicas y la negociación internacional. Como Ministro de Relaciones Exteriores de Paraguay, lideró iniciativas para promover el comercio y la inversión, además de participar en negociaciones estratégicas con Argentina, Bolivia y Brasil. Su enfoque se centra en el desarrollo de infraestructura, energía, educación y cooperación económica para impulsar el crecimiento de la región.

Además de su experiencia diplomática, se caracteriza por un perfil técnico y pragmático, alejado de posturas ideológicas, con una visión estratégica orientada a la atracción de inversión extranjera y el desarrollo sostenible.

La OEA y su papel en la región

La Organización de los Estados Americanos (OEA) es el principal foro de cooperación y diálogo político en el continente, integrada por 32 países. Su misión es fortalecer la democracia, la seguridad, los derechos humanos y el desarrollo económico en la región. Sin embargo, en los últimos años, la OEA ha sido criticada por la falta de efectividad en la resolución de conflictos y la polarización entre sus miembros.

Ramírez Lezcano aspira a revitalizar el organismo con un enfoque basado en resultados, impulsando una OEA más activa en la promoción de inversiones, el fortalecimiento institucional, respeto a los derechos humano y la integración económica.

Encuentro con empresarios mexicanos: diálogo clave para la inversión y el desarrollo

Estas reuniones se han llevado a cabo en distintos países de Latinoamérica bajo la coordinación de Manuel Acosta, vicepresidente de Asuntos Políticos del Global Center for Human Rights (GCHR). Acosta destacó la importancia del sector empresarial en la construcción de alianzas estratégicas para el desarrollo de la región y expresó su agradecimiento a la Fundación Incluyendo México, A.C. Representada por Tomás Ibarra, la fundación ofreció una visión sobre su labor y enfatizó la relevancia de participar y respaldar al candidato.

Entre los asistentes se encontraban empresarios de alto nivel en sectores clave como infraestructura, energía, seguridad y tecnología, destacando Francisco Cervantes, presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), en su intervención resaltó el papel de la iniciativa privada en la estabilidad económica y el crecimiento de la región, enfatizando que una OEA renovada debe fomentar condiciones favorables para la inversión y el comercio; Juan José Sierra Álvarez, presidente de COPARMEX, subrayó la importancia de construir puentes entre los sectores público y privado para generar oportunidades de desarrollo sostenible, así como Eduardo Bours, empresario, ex coordinador el CCE y ex gobernador de Sonora, destacó que este tipo de encuentros representan una oportunidad para fortalecer el papel clave del sector empresarial en el desarrollo de Latinoamérica y enfatizó el apoyo para concretar acciones en un impacto real.

La visión de Rubén Ramírez Lezcano para la OEA

Estructurada en cuatro ejes fundamentales:

Fortalecimiento de la democracia y la estabilidad institucional.
Promoción de la inversión y el comercio intra-regional.
Desarrollo de infraestructura y financiamiento para proyectos estratégicos.
Innovación y educación como motores del crecimiento.

“El continente necesita una OEA efectiva y centrada en resultados. Debemos transformar el organismo en un espacio de acción y no solo de debate, donde se generen soluciones reales para nuestras economías y sociedades”, afirmó.

Además, el candidato destacó la importancia de generar un entorno favorable para las inversiones, asegurando seguridad jurídica y estabilidad macroeconómica en los países miembros.

Intercambio de ideas y cierre del evento

El evento concluyó con una intervención de Sebastián Schuff, presidente del Global Center for Human Rights, quien reafirmó la importancia de una OEA que promueva el desarrollo económico sin perder su esencia como garante de la democracia y los derechos humanos.

Conclusión: Una OEA de resultados

La reunión con empresarios mexicanos confirmó el interés del sector privado en la visión de Rubén Ramírez Lezcano para transformar la OEA en un organismo más efectivo y orientado a la acción. Su enfoque podría marcar un punto de inflexión en la conducción del organismo, atrayendo el respaldo de diversos sectores dentro de los países miembros.

Mtro. Guillermo Moreno Ríos
Ingeniero civil, académico, editor y especialista en Gestión Integral de Riesgos y Seguros. Creador de Memovember, Cubo de la Resiliencia y Promotor del Bambú.
incide.guillermo@gmail.com

La opinión emitida en este artículo es responsabilidad del autor y no necesariamente refleja la postura de Siete24.mx

Seguir leyendo

Columna Invitada

El mal mayor

Publicada

on

Estamos en México en una situación donde prevemos una serie de males que nos están preocupando como sociedad. El balance de poderes entre el Ejecutivo, el Legislativo y el Judicial, el problema del Infonavit, las deportaciones de migrantes y otras ocurrencias del señor Trump así como otros asuntos adicionales de lo cual no es el menor, el de la paz en el país. Una serie de males que no encontramos una manera fácil de resolver.

Por otro lado, hay un problema que está en la raíz de varios de estos males y que es de más largo plazo, probablemente peor que lo que estamos percibiendo en los otros y que, si se resolviera, habría una solución más completa para todos los demás males. Ese asunto es la falta de participación ciudadana en lo político y lo social.

Tenemos la mala costumbre de dejar muchas cosas en manos del gobierno, como si quien manda tuviera la posibilidad o la obligación de resolver por nosotros muchas de nuestras dificultades. Esa costumbre nos ha hecho ser muy buenos para criticar. Lo cual está muy bien. Sí, debemos de criticar, por supuesto, pero no deberíamos de quedarnos en esto. No basta solamente con la crítica. Hay que pensar que también tenemos que ser proactivos, tenemos que participar. Y todo esto nos trae un gran desánimo al ciudadano común, precisamente porque vemos que, por más que haya críticas y señalamientos, el gobierno no toma soluciones.

¿Qué es lo que está pasando aquí? ¿Es inútil la participación ciudadana? ¿Se está haciendo cierto ese dicho de que somos ciudadanos sin poder? Porque, efectivamente, estamos haciendo una parte de nuestra tarea, pero aparentemente no es suficiente. Y eso está en la base de muchos de nuestros males. Si estamos pensando que nuestra actividad ciudadana consiste, únicamente, en votar a su tiempo y después dedicarnos a exigirles a los elegidos, claramente le está haciendo falta algo, algo que estamos viendo que no ocurre.

Muy probablemente, el problema viene de que pensamos que toda la acción política debe venir de un solo grupo de actores, lo que normalmente llamamos el gobierno. Estamos viviendo la parálisis y posiblemente la muerte de muchas sociedades intermedias, que son importantísimas para el funcionamiento de la democracia.

¿Qué entendemos por sociedades intermedias? En un extremo, está el Estado, con sus tres poderes. Lo que se podría llamar el nivel más elevado de la sociedad política. Y luego, por otro lado, en la base está la familia, que es la célula de la sociedad. Entre estas dos, existen una gran cantidad de sociedades que no son necesariamente obligación o potestad del gobierno, sino que son asumidas por la ciudadanía. A esas les llamamos sociedades intermedias. En nuestro país, tradicionalmente hemos tenido muy poca participación y creación de este tipo de sociedades. Y, en los últimos tiempos, algunas de esas sociedades han desaparecido o han sido absorbidas por el gobierno.

Hay muchos ejemplos de este tipo de sociedades. Por ejemplo, sociedades de tipo filantrópico. No le podemos dejar al gobierno en exclusiva el papel de la filantropía, que muchas veces han asumido, a veces con razones y otras, básicamente, por tener una influencia sobre una clientela que después le puede rendir en otros aspectos. La cultura, que también muchas veces la encargamos al gobierno y nos quejamos de que no está haciendo lo suficiente por impulsarla. Cuando no podemos esperar que sea el único en desarrollarla.

En otros campos, está la investigación, por ejemplo, de tipo académico y sobre todo de tipo tecnológico, donde las sociedades civiles e incluso las sociedades mercantiles tienen un papel importante. No podemos pensar que solo el gobierno tiene esa obligación. Y desde luego, la economía, donde la empresa privada, sobre todo, debe de tener su ámbito y su libertad.

El punto fundamental aquí, es que no debemos esperar del gobierno todas las soluciones, ni que sea el único actor en temas políticos y sociales. Esto no ocurre en una democracia bien constituida. A esto se le llama una democracia participativa, y es precisamente la idea. Un sistema de gobierno donde hay participación de los ciudadanos, para asegurar que la democracia se dé plenamente.

Claramente, puede darse el caso, que ocurre con cierta frecuencia, que no existan las sociedades intermedias, o estas sociedades no están haciendo su tarea. En esos casos, es posible que el gobierno, de una manera subsidiaria, provea un apoyo temporal. Pero claramente se trata de algo transitorio. No se puede estar subsidiando de manera permanente a las actividades que les tocan a las sociedades intermedias.

Nos está fallando ese tramo muy importante de la democracia. No podemos seguir atenidos a que el gobierno se haga cargo de todo y suponer que con quejarnos y hacer públicos nuestros señalamientos, ya todo se va a resolver. No se dice que la ciudadanía no se queje. Por supuesto que es relevante. Es necesario que le hagamos saber al gobierno las cosas que la ciudadanía considera importantes. Pero no es suficiente.

Si no tenemos participación, es difícil que convenzamos al gobierno de esta necesidad. Se requiere educar a la ciudadanía para que cambie sus convicciones y se vea realmente en un papel protagónico, un rol significativo. Donde, a distintos niveles, todos los ciudadanos estemos participando, de tiempo parcial o, en algunos casos de tiempo completo, para lograr que se dé en los hechos la democracia.

La opinión emitida en este artículo es responsabilidad del autor y no necesariamente refleja la postura de Siete24.mx

Seguir leyendo

Te Recomendamos