México
Cyberpuerta: el mejor lugar para trabajar en México 2024
Todos queremos un ambiente laboral agradable en el que podamos desarrollarnos profesionalmente y obtener un buen rendimiento económico. Según el instituto Great Place To Work en México, esto lo puedes conseguir si trabajas en Cyberpuerta.
En esta nota te contamos qué llevó a esta empresa mediana a ganar este prestigioso galardón. Si eres un empresario puede que descubras cómo mejorar el ambiente laboral de tu negocio, o si estás buscando empleo, quizás te animes a postularte en Cyberpuerta.
¿Qué es Cyberpuerta?
Cyberpuerta es una tienda online que vende equipos y otras soluciones de computación. Desde su fundación en 2008, ha ido incorporando más y más artículos a su catálogo hasta convertirse en lo que es hoy: un distribuidor respetado tanto para usuarios generales como para empresas.
Actualmente, su catálogo supera los 55.000 productos, entre los que están laptops, computadoras, monitores, impresoras, componentes y hardware. Otro punto a su favor es su servicio de envío responsable que entrega los pedidos en la puerta de las casas de sus clientes.
Cyberpuerta obtiene el Great Place To Work 2024 en México
El buen desempeño interno de las empresas es premiado por el instituto Great Place To Work. Esta entidad tiene alcance internacional y es reconocida por las principales empresas del mundo como un aval de calidad y buen desempeño laboral.
Es por eso que Cyberpuerta Great Place To Work 2024 es un gran reconocimiento para esta empresa relativamente joven, en comparación con otras grandes marcas del país. Y es aún más destacable al saber que fue en la categoría de 50 a 500 empleados, ya que esta es muy reñida.
Además, el sector de Tecnologías de la Información es sumamente competitivo en cuanto a la oferta de productos y servicios. Sin embargo, para el instituto Great Place To Work lo importante es el rendimiento interno, es decir, cómo de bien se lleva el recurso humano.
De manera que el que a Cyberpuerta se le haya otorgado este premio, realza su marca dentro del sector, por lo que es probable que en los próximos años crezca todavía más.
Otros galardones otorgados a Cyberpuerta
Desde hace 4 años, Cyberpuerta ha sido incluida como parte de las empresas Great Place To Work (GPTW). Sus 350 empleados han reconocido el buen ambiente laboral que les ofrece.
Es por eso que en 2024 se le otorgaron estos otros galardones:
- Puesto #14 en el Best Workplaces for Women México.
- Puesto #2 en el Ranking Nacional del sector Tecnologías de la información.
- Puesto #2 en el Ranking Regional Occidente.
- Puesto #14 de Los mejores lugares para trabajar en América Latina.
¿Qué hace a Cyberpuerta el mejor lugar de México para trabajar en 2024?
GPTW ha desarrollado una serie de herramientas para medir la satisfacción de los empleados de una empresa. Así que para obtener su reconocimiento hay que cumplir con sus estándares de calidad laboral.
Antes mencionamos que Cyberpuerta tiene un amplio stock y que su equipo está compuesto por unos 350 empleados. Este crecimiento es especialmente notorio si tenemos en cuenta que se trata de un negocio 100% online.
En sus poco más de 10 años de existencia, el equipo directivo de la empresa se ha esforzado por garantizar los derechos laborales de sus empleados. Por ejemplo, cuentan con un fondo de ahorro, reparto anual de utilidades y 30 días de aguinaldo. Por otra parte, implementan el flexiworking, una filosofía de trabajo que consiste en adecuar el horario para que los empleados se sientan bien y tengan mejor rendimiento. Adicionalmente, realiza dinámicas y eventos para integrar al personal.
Otras razones por las que se le otorgó el premio a Cyberpuerta son:
- Fomenta la preparación profesional y el crecimiento personal de sus trabajadores.
- Promueve valores como la integridad, la eficacia y la calidad en el servicio prestado al cliente.
- Valora la iniciativa propia, el talento y la pasión por el trabajo, y la recompensa con bonos adicionales al sueldo habitual.
- Está en constante adición de personal cualificado para mejorar sus servicios, lo que, a su vez, agrega valor a la marca.
Te puede interesar: Mascotas generan un ambiente positivo y feliz en el trabajo
Historias que Conectan
Deportado dos veces, hoy es uno de los grandes chefs de México
A Eduardo “Lalo” García nadie le regaló un lugar en la cocina. Antes de convertirse en uno de los chefs más influyentes del país, fue niño jornalero en los campos de Estados Unidos, migrante indocumentado, lavaplatos con documentos falsos, preso, cocinero autodidacta, deportado dos veces y, finalmente, un hombre que aprendió a transformar el dolor en algo que alimenta.

Su historia empieza lejos de las mesas elegantes, muy antes de Máximo Bistrot, mucho antes de que los críticos lo celebraran. Empieza en los surcos de tierra, con las manos de un niño que trabajaba como adulto.
Un niño entre surcos y madrugadas
Lalo, originario de Guanajuato, tenía cinco años cuando su familia cruzó a Estados Unidos para unirse a la ruta agrícola. Su infancia transcurrió entre naranjas, limones, cebollas, manzanas, pepinos y hongos —siguiendo la misma ruta migrante de miles de familias latinoamericanas que sostienen el sistema alimentario estadounidense sin que casi nadie lo note.
No fue a la escuela. No aprendió a leer ni a escribir de niño. Aprendió algo más duro: resistir.
Su trabajo consistía en llenar cubetas, redimir fichas a cambio de monedas y cargar costales más grandes que él. “Era mi versión de jugar videojuegos”, diría años después. Un juego de sobrevivencia. Un juego en el que no podía perder.
Esas cicatrices que menciona todavía las tiene en las manos.
@savethechildren_mx Eduardo García, mejor conocido com chef Lalo y embajador de Save the Children, nos contó para #ElPoderDeUnSueño cómo fue que lo que pasó en su niñez lo motivó a ser uno de los mejores chefs del mundo hoy. Lalo es nuestra inspiración día a día y la de miles de niños que cómo él, quieren ser chefs y cocinar a toda su familia 👨🍳👩🍳 ¡Gracias Lalo por enseñarnos que el poder de un sueño es posible! #chef #cocina #lifestory ♬ sonido original – Save the Children Mx
Encontrar la cocina… y también los errores
A los catorce años, su familia se mudó a Atlanta. Allí consiguió trabajo lavando platos en un restaurante. Se movía rápido, entendía todo a la primera, y en cuestión de meses pasó de la tarja a la estación de ensaladas.
Un compañero puertorriqueño lo vio y le dijo algo que jamás había escuchado: “Tú eres talentoso.”
Ese comentario cambió algo en él.
Pero la vida de un joven indocumentado en un país ajeno es frágil. En ese camino aparecieron compañeros equivocados, decisiones impulsivas y una cadena de errores que terminaron en un asalto a una licorería, un arresto y una condena: un año en una prisión de condado y tres años en una cárcel de máxima seguridad en Georgia.
Cuando las autoridades migratorias descubrieron su estatus irregular, lo deportaron por primera vez. Año 2000.
Volvió a México sin saber qué hacer con su vida.
Cruzó de nuevo… para despedirse de su padre
Dos semanas después de su deportación, recibió una llamada que lo partió en dos: su padre estaba muriendo de cáncer.
Sabía que regresar a Estados Unidos como indocumentado era un riesgo que podía destruir lo poco que tenía, pero lo hizo. Cruzó con documentos falsos por el puente de Nuevo Laredo. Esta vez no buscaba trabajo. Buscaba a su padre.
Y aunque los médicos dijeron que viviría dos semanas, vivió seis años más. Ese tiempo fue un regalo, pero también un espejo: Lalo sabía que no pertenecía a ningún lado. No era “de allá” ni de “aquí”.
Durante esos años trabajó como cocinero, aprendió por observación, estudió libros de Charlie Palmer y Charlie Trotter, experimentó con técnicas francesas, limpió, quemó, repitió. Nunca fue a una escuela culinaria. Su escuela fue la vida que lo había golpeado sin piedad.
En 2007, agentes migratorios aparecieron en su lugar de trabajo. Lo tomaron por sorpresa, pero él ya lo esperaba. Fue detenido y deportado por segunda vez. Esta vez, con prohibición permanente para volver a Estados Unidos.
Volver a México… y cocinar con memoria
En México comenzó desde cero. Pasó por Los Cabos, luego llegó a Ciudad de México. Allí encontró un lugar donde su historia —por primera vez— no lo marcaba como un crimen, sino como un ingrediente de su identidad.
Entró a Pujol, uno de los mejores restaurantes del país. Y algo hizo clic.
La cocina mexicana estaba cambiando. Una nueva generación apostaba por el origen, por el producto local, por la milpa, por los campesinos, por honrar la tierra. Sin saberlo, Lalo llevaba esa historia tatuada desde niño: la historia de quienes siembran y cosechan sin ser nombrados.

En 2011 abrió Máximo Bistrot junto a su esposa Gabriela. Eran cuatro empleados, un local pequeño y un sueño sencillo: cocinar bien.
Nada más. Nada menos.
Años después, Máximo sería considerado uno de los mejores restaurantes de México. Su cocina —francesa en técnica, mexicana en alma— se hizo un imán para críticos, amantes de la comida y viajeros que buscaban más que platos bonitos: buscaban verdad.
El chef que decidió que sus empleados no tendrían que migrar
Un día, mientras Máximo crecía, Lalo notó algo que le tocó el corazón:
sus empleados estaban construyendo casas con el sueldo que ganaban.
Muchos de ellos habían sido migrantes. Habían trabajado en los mismos campos y cocinas que él. Habían enviado dinero por años para construir algo en su pueblo. Ahora, por primera vez, podían vivir bien sin irse de México.
Entonces tomó una decisión que cambiaría su misión:
crecer el negocio para generar trabajo digno, para que otros no tuvieran que repetir su historia de migración dolorosa.
Actualmente dirige varios restaurantes, asociaciones en México, Londres y Dubái, y emplea a más de 130 personas. Y aunque su nombre aparece en premios, listas y guías culinarias, él nunca olvida quién fue.
Uno no es su peor decisión
Lalo suele decir algo que resume su vida:
“No me escondo de nada de esto porque quiero que la gente sepa quién soy.”
Su historia es incómoda. Difícil. Real.
Pero también es profundamente humana.
Nos recuerda que una persona no es su error. No es la etiqueta que un sistema le coloca. No es su peor día. Es su capacidad de levantarse, transformarse y servir.
Eduardo García no es solo un chef famoso.
Es la prueba de que las segundas oportunidades existen.
Que las manos que siembran también pueden crear belleza.
Que volver a casa puede sanar una vida entera.
Que la dignidad no la da un papel, sino el trabajo honesto.
Y que, al final, todos los grandes caminos empiezan igual: con una historia que duele… y que se decide no dejar ahí.
¿Dónde seguir a Lalo García?
Para conocer más de su trabajo, su cocina y su visión del mundo:
- Instagram de Máximo Bistrot: @maximobistrot
- Instagram personal: @eatlalo
- Libro recomendado: The Migrant Chef (Laura Tillman) – una mirada profunda y humana a su vida y su obra.
- Sitio web: www.maximobistorot.com.mx
México
Mascotas hacen más sociables a los jóvenes
Ciudad de México.- Vivir con un perro cambia el día a día de muchos jóvenes y hoy la ciencia ofrece nuevas pistas sobre este vínculo.
Un estudio reciente, publicado en iScience y realizado por instituciones científicas de Japón, analizó cómo la presencia de un perro influye en la salud mental y en la sociabilidad de adolescentes.
hallazgos muestran un impacto positivo que se refleja en menos estrés, mayor interacción social y un bienestar emocional más estable.

El equipo encabezado por Takefumi Kikusui, de la Universidad de Azabu, estudió el microbioma bucal de 345 adolescentes que vivían con un perro y lo comparó con el de jóvenes sin mascota.
El análisis mostró diferencias claras en la composición microbiana pese a tener una diversidad similar. Estas variaciones se relacionaron con mejores puntuaciones psicológicas en quienes compartían su hogar con un perro.
Kikusui explicó que la investigación nació tras trabajos previos que mostraron un mayor bienestar mental en adolescentes con perro.
El equipo sabía que la microbiota influye en el comportamiento a través del eje intestino-cerebro, así que decidió explorar si este vínculo se reflejaba también en los jóvenes.

Los participantes con perro mostraron menos problemas sociales y menos señales de soledad o ansiedad.
El estudio destacó que los perros ofrecieron seguridad, compañía y oportunidades naturales para socializar.
La adolescencia es una etapa de profundos cambios emocionales y sociales.
El cerebro y las hormonas influyen en la toma de decisiones, la regulación de impulsos y la forma en que los jóvenes construyen vínculos. Por ello, encontrar factores que favorezcan el bienestar en esta etapa resulta esencial.
El estudio mostró que tener perro a los 13 años se asocia con una mejor salud mental.
Kikusui señaló que este efecto no explica todo el bienestar del joven, pero forma parte de un conjunto de influencias positivas que pueden marcar una diferencia.
Los científicos ampliaron la investigación usando ratones de laboratorio.
Te puede interesar: “No hay descanso emocional”: así afectan las redes sociales al desarrollo adolescente

Tras inocularles microbiota de adolescentes con perro, observaron que los animales mostraron más interés social hacia sus compañeros y más disposición a ayudar a un ratón atrapado.
Este comportamiento sugirió que el microbioma podría desempeñar un papel en la conducta prosocial.
Los resultados describen la relación humano–perro y como un vínculo que acompaña, sostiene y promueve empatía en momentos decisivos de la vida.
La convivencia diaria impulsa rutinas más activas, conversaciones espontáneas y conexiones que fortalecen la confianza de los jóvenes.
El efecto positivo no depende solo del perro, destacan los investigadores, pero su presencia puede convertirse en un puente hacia relaciones más sanas y una vida emocional más equilibrada.
El equipo ya inició un nuevo estudio sobre microbioma y bienestar en personas mayores.
Su objetivo es entender cómo estas dinámicas influyen a lo largo de la vida y cómo la compañía de un perro puede seguir sumando bienestar en distintas etapas.
La ciencia abre un camino para comprender un vínculo conocido desde siempre: un perro no solo acompaña, también impulsa crecimiento, empatía y salud emocional.

Un recordatorio de que, en muchos hogares, el afecto y la compañía pueden transformar vidas jóvenes cada día.
ARH
México
Invierno y gripe: proteger a los más pequeños
Ciudad de México.- La temporada de gripe 2024-2025 llegó con fuerza, golpeando más a los más jóvenes y a sus familias. En EE.UU., los datos oficiales muestran que la tasa de hospitalización por influenza alcanzó los niveles más altos desde al menos 2010-2011.
En este escenario, proteger a bebés y niños pequeños se convierte en prioridad para padres, cuidadores y autoridades.
Durante el periodo de octubre de 2024 a abril de 2025, la Centers for Disease Control and Prevention (CDC) identificó una tasa acumulada de hospitalización por gripe de 127.1 por cada 100 mil personas, cifra que superó con creces el mediano histórico de 62.0 en temporadas anteriores.

Esta temporada se clasificó como “de alto riesgo” para todos los grupos de edad.
Los niños menores de 2 años registraron los índices más elevados de hospitalización por gripe, ya que su sistema inmunitario aún se encuentra en desarrollo.
Los bebés menores de 6 meses presentan la mayor vulnerabilidad, pues no pueden ser vacunados directamente.
El contagio de los más pequeños no es solo estadística: implica mayor riesgo de internación, complicaciones y angustia familiar.

El sistema inmune en desarrollo y la baja exposición previa a virus de la influenza explican en buena parte esa situación.
Al mismo tiempo, organismos como la American Academy of Pediatrics (AAP) y la CDC recomiendan la vacunación anual a partir de los 6 meses, y que los familiares cercanos también se inmunicen para crear una “burbuja” protectora.
Te puede interesar: Colectivo de Mujeres pide unir esfuerzos en favor de la vida, familia y matrimonio
Cuando los padres o cuidadores enferman, pueden contagiar al bebé.
Si los adultos inmunizados evitan la infección, reducen la exposición en el hogar.
Además, la vacuna no sólo previene el contagio sino que disminuye la gravedad del cuadro.
Vacunar al niño (a) a los 6 meses o más y, de ser su primera vez o haber recibido sólo una dosis antes del 1.º de julio del año previo, aplicar dos dosis con cuatro semanas de diferencia.
Cada adulto immunizado protege al bebé que aún no puede recibir vacuna.
Expertos recomiendan consultar al pediatra ante síntomas como fiebre alta, dificultad para respirar o decaimiento; los antivirales son más eficaces si se administran dentro de las primeras 48 horas.

Mantener limpias las manos, ventilar espacios y, en lo posible, aislarse si se presentan síntomas para evitar contagiar al niño pequeño.
ARH
México
“No hay descanso emocional”: así afectan las redes sociales al desarrollo adolescente
Ciudad de México.— Sin importar la hora miles de adolescentes entran en un universo digital donde no existe pausa posible. Conversan sin hablar, comparten sin mirar, conviven sin presencia. Entre pantallas y notificaciones se juega una parte decisiva de su desarrollo emocional un territorio donde especialistas alertan sobre una tendencia que crece: mayor ansiedad y menor autoestima.
El artículo “Cómo afecta el uso de las redes sociales a adolescentes” de Child Mind Institute reporta los desafíos de una generación que crece en un entorno de interacción permanente. Las redes sociales modifican la convivencia y el desarrollo emocional, generan tensiones nuevas y exigen acompañamiento cercano.
Una generación que interactúa sin señales visibles
Las expertas clínicas Catherine Steiner-Adair, EdD, y Donna Wick, EdD, explicaron a Child Mind Institute que los adolescentes están formando vínculos con menos herramientas sociales que generaciones anteriores. La comunicación digital elimina gestos, miradas y matices que antes funcionaban como guía en la convivencia presencial.
La ausencia de señales no verbales provoca malentendidos y eleva la ansiedad social. Cada interacción ocurre con un distanciamiento que vuelve más difícil interpretar emociones. El intercambio deja de ser directo y se convierte en mensajes breves que cada persona elabora sin la tensión propia del encuentro cara a cara.
Comparación constante y los efectos en la autoestima
Explican que cuando un adolescente tiene una percepción negativa de su apariencia o de su vida cotidiana, pasar por redes sociales puede profundizar ese malestar. Las imágenes perfectas —producidas, filtradas o retocadas— crean un espejo distorsionado que afecta la autoestima.
Una encuesta de la Royal Society of Public Health aplicada a jóvenes británicos de entre 14 y 24 años muestra que plataformas como Instagram, Snapchat, X y Facebook incrementan sensaciones de ansiedad, tristeza, soledad e insatisfacción corporal. En un entorno donde la aprobación se mide con “me gusta”, muchos adolescentes invierten tiempo ajustando su identidad digital.
Amistad bajo nuevas reglas
Catherine Steiner-Adair, detalla que la amistad exige habilidades que se fortalecen con práctica real. Expresar emociones, resolver conflictos y escuchar requieren un aprendizaje que no se desarrolla en conversaciones intermitentes por texto. Cuando la interacción se traslada a pantallas, los adolescentes enfrentan menos riesgo emocional inmediato y tienen menos oportunidad de experimentar esas dinámicas.
Señala que muchos jóvenes perciben una llamada telefónica como un acto intenso. La conversación directa impone un nivel de presencia que se ha vuelto difícil de sostener para quienes rara vez la practican.
Crueldad, presión social y el temor a no ser suficiente
Donna Wick, EdD, observa que adolescentes escriben mensajes que jamás dirían cara a cara. En el caso de las niñas, esta tendencia aparece con más frecuencia, debido a la presión social por mantener armonía en círculos de amistad.
Catherine Steiner-Adair, EdD, señala que la autoestima se consolida cuando una persona reconoce quién es. La multiplicación de identidades digitales confunde ese proceso y alimenta la sensación de impostura, un fenómeno que Wick identifica como similar al “síndrome del impostor”.
Hiperconexión y silencios que pesan
Para Donna Wick, EdD, esta hiperconexión genera ansiedad porque no permite descanso afectivo. La tecnología elimina momentos de pausa. Aplicaciones que muestran ubicaciones, actualizaciones continuas y expectativas de respuesta inmediata crean un estado de alerta emocional permanente.
El silencio digital también adquiere un significado doloroso. Si una respuesta no llega, el adolescente interpreta el silencio como rechazo. Las relaciones pueden diluirse sin explicación, sin confrontación y sin oportunidad de cierre.
Papel de los padres en medio de la avalancha digital
Steiner-Adair como Wick coinciden en que el ejemplo adulto es el punto inicial del acompañamiento. Reducir el uso personal de dispositivos abre la puerta a que los adolescentes entiendan límites y prioridades.
Steiner-Adair recomienda establecer espacios y horarios sin tecnología en casa. La entrada al hogar después del trabajo, el trayecto a la escuela y los momentos designados para conversar deben mantenerse libres de pantallas. Esos espacios fortalecen el vínculo familiar.
Wick sugiere retrasar lo más posible el inicio en redes sociales y acompañar de forma respetuosa. Revisar mensajes sin motivo claro daña la confianza. Monitorear con apertura, sin invadir, permite preservar la comunicación.
Construir presencia y acompañamiento
Finalmente, concluyeron que limitar el tiempo de pantalla no busca prohibir la tecnología, sino equilibrar su peso. Cuando los adolescentes acuden a Internet para aclarar dudas o buscar consuelo, hallan información sin contexto y sin sensibilidad. La presencia de los padres permite ordenar emociones, aportar perspectiva y mantener estabilidad.
Son esos momentos cotidianos y constantes los que refuerzan la seguridad emocional y brindan herramientas para que los adolescentes enfrenten la presión digital.
📲 Comparte y dialoga con nosotros en WhatsApp
ebv
-
Culturahace 3 díasEl musical “Un cuento de Navidad” es para compartir con la familia
-
Estilohace 3 díasLa solución al bullying en adolescentes está en la familia
-
Columna Invitadahace 2 díasViolencia a la Mujer
-
Méxicohace 2 díasTecnología y violencia: factores que condicionan la salud mental en jóvenes



